Hoy comienza la cuadragésima quinta edición de La Feria del Libro y el Disco Vascos, con el erotismo como protagonista. No se trata de una edición dedicada a la literatura erótica, sino de una asociación en torno al placer, dado que también la creación es goce. Como no podía ocurrir de otra manera, al igual que otros eventos en los dos últimos años, especialmente culturales, también se caracteriza por ser la edición de la crisis, con un 30% menos de presupuesto. Sin embargo, y sin quitar importancia a ese recorte, el mayor capital de la cita de Durango será, una vez más, la gente. Escritores, músicos y editores y, sobre todo, los visitantes que durante cinco días recorrerán las calles de Landako, donde podrán ver e incluso tocar las numerosas novedades que en los diferentes géneros ofrece este año la Feria. En los últimos días se han presentado varias de ellas; ayer mismo, el ensayo de Joseba Sarrionandia, que por su volumen y la reconocida trayectoria de su autor, promete largos ratos de buena literatura, es decir, de placer. Dentro de cinco días se sabrá en qué medida afecta la crisis también a los visitantes; en cualquier caso, es de esperar que ese acontecimiento cultural, con sus aciertos y sus elementos polémicos, siga gozando de buena salud y los visitantes sigan gozando de la buena literatura y la buena música.