
Maite SOROA
Nervios tras las apariencias
Tras la apariencia de seguridad y fortaleza, tengo para m� que los m�s encendidos defensores del nacionalismo espa�ol s�lo ocultan preocupaci�n por el devenir de los acontecimientos. Ayer Germ�n Yanke, en �Estrella Digital�, se apoyaba en la nueva sentencia del Tribunal de Estrasburgo, pendiente de recurso, sobre las candidaturas de ANV anuladas por el Gobierno espa�ol para buscar un cierto sosiego. Insist�a Yanke en que la sentencia -obviaba los dos votos particulares- �vuelve a establecer que la Ley de Partidos -y las ilegalizaciones y anulaci�n de candidaturas fraudulentas- se ajusta al Convenio europeo de Derechos Humanos. El Tribunal, reiteradamente, ha se�alado que la propia defensa de la democracia y el sistema constitucional impide que puedan ser avaladas candidaturas que, por su vinculaci�n de uno y otro modo con ETA y la violencia, sean instrumentos contra esos principios�.
Y despu�s de la soflama, ven�a la confesi�n: �Viene el caso al intento de Batasuna de estar presente, con marca propia, en las pr�ximas elecciones locales. La reglas para comparecer en los comicios, avaladas por el Tribunal, est�n claras. Quien desee estar presente sabe lo que tiene que hacer y lo que una democracia seria no puede permitir. Y, por otro lado, la evidencia legal -nacional y europea- demuestra que no tiene sentido alguno, como se hace habitualmente, pedir a las instituciones del Estado, especialmente al Gobierno, que de alg�n paso, que rectifique o que se muestre con `generosidad' ante las pretensiones de Batasuna�. E insiste: �El �nico rumbo es, por tanto, el de la ley y la �nica exigencia al Gobierno debe ser el respeto de la misma y, con �l, el de los derechos de los ciudadanos que ser�an vulnerados con cualquier tipo de esa `generosidad' que se demanda�. Y dale. Pero aqu� �qui�n pide generosidad? Lo que demanda la inmensa mayor�a de la sociedad vasca es libertad de expresi�n, reuni�n, manifestaci�n y participaci�n en pol�tica. Lo mismo que niegan Yanke y compa��a. Ser� por eso que est�n nerviosos.