El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, destituyó ayer al ministro de Exteriores, Manoucher Mottaki, justo cuando Irán acaba de reanudar las negociaciones con las grandes potencias sobre su programa nuclear.

El ministro ha sido reemplazado temporalmente por el responsable en en materia nuclear, Ali Akbar Salehi.

El sorpresivo cese de Mottaki fue anunciado con la publicación de dos directivas lacónicas del presidente, que le agradeció su trabajo como ministro, y en las que pidió a Salehi que tome temporalmente las riendas de la cancillería con su «valiosa experiencia».

Ahmadineyad no dio explicaciones sobre la destitución ni indicó el nombre del posible sucesor de Mottaki, que deberá contar con el aval parlamentario.

El cese de Mottaki, ministro de Exteriores desde 2005, se produce en el momento en el que, tras un año de bloqueo, Irán retomó la pasada semana en Ginebra las negociaciones con las grandes potencias por su programa nuclear.

El Ministerio iraní de Exteriores apenas interviene en estas negociaciones, confiadas actualmente a Said Jalili, secretario general del Consejo Supremo de Seguridad Nacional.

Vicepresidente

Salehi, nombrado a la cabeza de la Organización de Energía Atómica Iraní (OEAI) en julio de 2009, es también vicepresidente de la República islámica.

Embajador de Irán ante la AIEA durante cuatro años, hasta enero de 2004, Salehi es un físico nuclear que estudió en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en Estados Unidos, y los occidentales lo apreciaban por sus posiciones moderadas.

En los últimos meses se hizo omnipresente en la prensa iraní, anunciando sucesivamente los logros del programa nuclear pese a las numerosas sanciones internacionales.

EEUU y sus aliados insisten, a pesar de que Irán lo ha desmentido una y otra vez, que el programa nuclear del país persa tiene objetivos militares. Teherán ha defendido por activa y por pasiva que su programa nuclear no estará dirigido a hacerse con armamento de este tipo, sino que es un programa atómico de carácter civil.

Según apunta Mohamad Saleh Sedghian, director del Centro árabe de estudios iraníes con sede en Teherán, el cese de Mottaki se debería a rivalidades internas. Entre ellas, cita que Mottaki se habría opuesto a los esfuerzos del presidente iraní de desarrollar una «diplomacia paralela» mediante otro grupo de consejeros.