Txelui Moreno, Xanti Kiroga y Marine Pueyo participaron ayer en un desayuno con periodistas en el que remarcaron que «el sujeto político en Nafarroa no debe ser un obstáculo». Según explicaron los portavoces de la izquierda abertzale, los contactos con los distintos agentes políticos, sociales y sindicales, continúan abiertos y su objetivo es «profundizar en los contenidos» de cara a conseguir un mínimo programático que permita concurrir a las elecciones en coalición.

Kiroga dejó claro que para la izquierda abertzale resulta «mucho más positivo» presentarse a las elecciones al Parlamento de Nafarroa «en colaboración con otras formaciones». Su apuesta es forjar una alianza que permita hacer frente a la derecha para que el cambio «sea factible». Al mismo tiempo, afirmó que el objetivo no es minar NaBai, pero incidió en que las propuestas de la coalición pecan de falta de ambición y la izquierda abertzale «aspira a más». Y comentó que la izquierda abertzale es consciente de que muchos tratarán de poner palos en la rueda para que este acuerdo de mínimos con otras formaciones navarras no fructifique.

Pueyo, por su parte, concretó que las bases políticas sobre las que se asienta NaBai resultan «totalmente insuficientes» ya que, por ejemplo, sigue apostando por el Amejoramiento como marco jurídico válido, mientras que para la izquierda abertzale ese texto constituye un «límite» al derecho a decidir. La concejala de Iruñea criticó también la apuesta de «cambio tibio» que, según indicó, mantiene NaBai porque sigue depositando su confianza en el PSN para desbancar a UPN del poder. Pueyo dijo que el PSN ya ha demostrado que es incapaz de convertirse en una alternativa de gobierno, puesto que «si no lo fue en 2007, en 2011 lo será mucho menos».

Para la izquierda abertzale, a NaBai le falta altura de miras para este momento político y. achaca a la coalición el hecho de no haber incluido los principios del Acuerdo de Gernika entre sus bases políticas.

Moreno insistió en que la izquierda abertzale no quiere «colarse» en las próximas elecciones, sino que «va de cara». Su estrategia es «confrontar políticamente por vías democráticas buscando alianzas, adhesiones y movilización social», explicó. En este contexto, criticó con dureza al fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, que recientemente ha asegurado que no basta con que que la izquierda abertzale cumpla la ley para superar la ilegalización. «Es como para meterlo en la cárcel», manifestó.