Los más de nueve mil metros cuadrados del museo Balenciaga serán inaugurados en verano
Las obras estructurales del museo Balenciaga están ya finalizadas, por lo que se prevé que el proyecto, con un coste total de 20 millones de euros -14 más del presupuesto inicial-, se inaugure en verano del año que viene.
Ariane KAMIO | GETARIA
El nuevo museo Balenciaga está ya casi acabado. Las obras en sus estructuras están finalizadas, por lo que ahora sólo queda mostrar en sus más de ochenta vitrinas las creaciones más importantes del desaparecido modisto Cristóbal Balenciaga.
El edificio se erige en un alto de su localidad natal, Getaria, junto al Palacio Aldamar, y alcanza una superficie total de 9.323,03 metros cuadrados repartidos en cinco plantas. A su vez, éstas han sido separadas en tres bloques; la primera albergará las funciones de acogida, estancia y exposición; la segunda, se centrará en funciones didácticas; y la tercerá se destinará a la gestión interna del museo. Su coste total ha ascendido a los 20 millones de euros, 14 millones más de lo estimado inicialmente.
La fecha de su inauguración tampoco es del todo exacta aunque, durante la visita que realizaron ayer el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, la Consejera de Cultura, Blanca Urgell, y la diputada de Cultura, María Jesús Aranburu, adelantaron que posiblemente podría abrir sus puertas en verano de 2011.
Seis salas y mil piezas
El edificio ha sido diseñado por los arquitectos Victoria Garriga y Toño Foraster, del estudio AV62, y han separado en seis salas diferentes el espacio expositivo del museo. Cada sala abordará una temática distinta, por lo que se separarán las diferentes creaciones de Cristóbal Balenciaga según su distinción. Entre ellas habrá una sala con vestidos para cóctel, otra con vestidos de noche, una sala «versus» y otra con trajes de novias.
La Fundación Balenciaga -formada por Diputación, Lakua, Ministerio de Cultura español, Ayuntamiento de Getaria y varios patronos privados- cuenta con alrededor de mil piezas -vestidos y complementos- para mostrarlas al público pero, debido a su delicadeza, éstas irán rotando cada seis meses por lo que, cada muestra, acogerá unas cien piezas. El resto de las creaciones se guardarán en el sótano del museo, especialmente acondicionado para que continúen conservándose en buen estado. Las vitrinas -alrededor de ochenta-, también han sido acondicionadas y hechas a la medida de cada prenda que se vaya a exponer ante el público.
900 metros cuadrados de este edificio han sido reservados para la futura escuela de alta costura.
Las negociaciones sobre Chillida Leku, otro de los asuntos que aún colea -hoy cierra sus puertas-, siguen adelante. Ayer, la consejera de Cultura de Lakua, Blanca Urgell, anunciaba que, «por primera vez, la familia Chillida tiene una batería de propuestas concretas de por qué camino se podría relacionar el proyecto con las instituciones de una manera formal».
La titular de Cultura añadió que «tenemos bastantes diferencias, pero existen dos temas clave. Una de ellas es si las instituciones nos convertiremos en dueños del patrimonio o no -nos tiene que aclarar la familia si quieren que formemos parte de ello-, y el segundo es cómo mejorar la gestión para que no se repita esta situación deficitaria». Para encontrar una solución, auguró por «hacer bien las cosas» y ser lo más «discretos posible», evitando así anunciar una fecha de reapertura del museo.
A,K.
