El curso televisivo ha comenzado sin concesiones. Todas las cadenas han variado en formas y/o en fondo. La excepción es la catatónica ETB. Es la mímesis con Rajoy. Mientras casi todos caminan, ellos se quedan quietos. Conseguirán cerrar el círculo y seguramente se han sentado en el quicio de su poltrona para ver pasar su propio cadáver político y profesional. A no ser que les despierten con nuevas consignas.

Decía lo de los caminantes porque a Matías Prats, después de tantos años viéndole solamente el cuello, el nudo de la corbata y sus peinados cada vez más con cabellera más disuelta, ahora lo vemos entero, de pie, dándose una caminata por un decorado absolutamente aberrante en Antena 3. Caminan, para dar sensación de movimiento, pero es un paseo inútil porque se trata simplemente de llegar desde un punto hasta la silla empotrada en un decorado excesivo en tamaño, muy poco ágil y que en el estreno con la entrevista a ZP, comprobamos que se trataba de una elaboración barroca de lo que había en CNN +, cuando Gabilondo entrevistaba a su invitado teniendo la mesa y los tertulianos como fondo de uno de los ejes de las cámaras.

Pero los caminantes que más nos van a dar que hablar en las próximas semanas han aparecido en La Sexta, en forma de serie, «The walking dead», con una propuesta absolutamente atractiva dada la calidad de su realización, el buen reparto y con un tema de los que siempre concitan grandes audiencias, pues se trata de uno de esos lugares de la ciencia-ficción, con los muertos-vivientes, los zombis, que crean espacios de intriga, de misterio, y que en esta serie, por los dos primeros capítulos ofrecidos, se plantea como una mezcla de fantasía fantástica, con ribetes policíacos, no exentos de concatenaciones políticas.

En cualquier caso, mientras centramos mejor los detalles argumentales de la trama, hay que destacar su realización, el maquillaje, el uso de los efectos especiales en cuanto a los disparos y la expansión sanguínea. De entrada se ha convertido en el mejor arranque de una serie en La Sexta, y se ha colocado con más de tres millones de espectadores. Lo que la hace competitiva y de referencia.