Tras la declaración de ETA
Rubalcaba contesta a Otegi «que deje de decirle lo que tiene que hacer»
El vicepresidente primero del Gobierno español y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, respondió ayer a Arnaldo Otegi tratando de devolverle la pelota. El dirigente independentista encarcelado decía ayer en una entrevista en este diario que «el Estado deberá asumir una gestión política para construir un escenario de soluciones definitivas», y el ministro le respondió que «deje de decirle al Gobierno lo que tiene que hacer» y que «se dirija a ETA».
GARA | GASTEIZ
El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, es un asiduo lector de GARA pero, si hay que creer lo que dijo en antena, ayer a la mañana llegó a la Cadena Ser sin haber hecho los deberes. «Todavía», según afirmó, no había leído la entrevista con Arnaldo Otegi que ayer ofrecía este diario, aunque había escuchado el titular en esa misma emisora. Y tirando de oído, respondió al dirigente independentista que «se equivoca de interlocutor. Que no tiene que hablar hacia el Estado, que el Estado tienen una posición muy clara». Según señaló, el líder abertzale tiene que dirigirse a ETA.
El vicepresidente primero, que donde Arnaldo Otegi habla de «soluciones definitivas» al conflicto no ve más que una apelación para la legalización, insistió en que «su problema, entre comillas, si es que quiere ser legal, no es el Estado, es ETA, que es quien contamina, si se me permite esa expresión, que no es muy buena. Por tanto, que se dirija a ETA y que deje de decirle al Gobierno lo que tiene que hacer. El Gobierno tiene que aplicar la ley y ellos tienen que cumplir la ley».
Ares le pide decisiones
También el consejero de Interior, Rodolfo Ares, abordó la entrevista con Arnaldo Otegi en declaraciones a Radio Euskadi. Ares se dirigió a los que denominó como «autocalificados dirigentes de los radicales abertzales» y les conminó a que deben «dejar de hacer sólo declaraciones y tomar decisiones».
En la entrevista de GARA a Otegi se le preguntaba sobre si «percibía ansiedad por la próxima cita electoral», a lo que respondía que veía «en primer lugar una creciente ansiedad en los sectores unionistas» por impedir la presencia de la izquierda abertzale, y admitía después que «también percibo cierta ansiedad en nuestra base social fruto de años de restricciones y limitaciones a nuestro derecho de participación electoral». Sin embargo, a la radio pública de la CAV sólo le interesó la ansiedad de la izquierda abertzale y por ella le preguntaron al consejero.
Rodolfo Ares respondió que lo que tienen que hacer sus «autocalificados dirigentes» es ponerse «a la cabeza» de esa ansiedad, y «tomar decisiones ellos. Y saben que tienen que marcar claramente distancia, alejarse, romper definitivamente con la violencia y hacer una apuesta muy clara por respetar las reglas de juego, los derechos humanos y la legalidad».
Muy duro con EA
Rodolfo Ares criticó también a los partidos que están en el Acuerdo de Gernika «que se conforman con lo que ha anunciado ETA, algunos de ellos traicionando claramente su propia historia». Luego explicó que se refería a EA.
El consejero dijo que se sentía defraudado por Eusko Alkartasuna y subrayó que su posición «es una terrible equivocación». «Si son coherentes con su historia, deberían mantener la exigencia a ETA de que deje definitivamente la actividad terrorista y no interpretar lo que ETA no ha dicho».
A su entender, EA tiene ahora «una magnífica oportunidad» de recuperar «su tradición» y reclamar a ETA el abandono definitivo de las armas. «Es una tremenda equivocación que una minoría de dirigentes políticos en Euskadi pretendan hacer política como si ETA hubiera desaparecido», concluyó.
Urkullu: «Otegi yerra»
El presidente del EBB, Iñigo Urkullu, también habló de la entrevista de Otegi y dijo que «es curioso cómo una persona que está en la cárcel tiene esta posibilidad de manifestación en entrevistas, aun cuando sean a modo de cuestionario. Yo sí creo que Arnaldo Otegi sigue siendo para la Batasuna ilegalizada y para los referentes que también están en libertad provisional, un referente».
Entrevistado en TVE, le preguntaron sobre la afirmación de Otegi de que «Urkullu miente cuando dice que no ha sido invitado» al Acuerdo de Gernika. El presidente del EBB respondió que él no se ha entrevistado con el ex portavoz de Batasuna, pe-ro él sabe con qué representantes de la izquierda abertzale ha estado reunido y conoce su contenido.
Luego añadió que «no sé lo que le han transmitido al señor Otegi, si es que le han transmitido algo, pero, en todo caso, el señor Arnaldo Otegi yerra absolutamente».
También la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, fue cuestionada sobre la entrevista y dijo que «quieren estar en las instituciones» y en función de la coyuntura «se inventa cosas nuevas».
El presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, exigió al Gobierno español que «ponga coto» a la salida de entrevistas de Arnaldo Otegi desde la cárcel, ya que se han producido tres en los últimos meses, y que deje de darle «naturaleza de normalidad» a un portavoz que «no se desmarca de ETA». Además, en cuanto al contenido de la entrevista, afirmó que demuestra que Batasuna es parte de ETA porque Otegi «habla en nombre de la banda» y no hay ni una petición de desmarque de la violencia, ni de condena. Basagoiti pidió también que «los medios que esperan la palabra de Otegi actúen con responsabilidad».
José Manuel Durao Barroso declinó ayer hacer «comentarios sobre ETA. Lo que puedo decir es que la Comisión Europea da su respaldo absoluto al Gobierno, a las autoridades democráticas de España, en su lucha contra el terrorismo».
Según filtraron ayer tarde fuentes de La Moncloa, durante la jornada Zapatero mantuvo dos contactos significativos para unificar discursos y estrategias. A mediodía recibió a Patxi López y por la noche al líder del PNV, Iñigo Urkullu, en una cena a la que también iba a asistir al parecer Alfredo Pérez Rubalcaba. GARA
«The New York Times», «The Guardian» y «The Irish Times» dedicaban ayer sus editoriales al alto el fuego. El primero lo hacía con más exigencias a ETA y los dos europeos pedían al Gobierno pasos sobre los presos y la legalización.
Jesús Eguiguren ha vuelto a agitar las aguas de su propio partido. Sus declaraciones diciendo que «para que todo fuera mejor» sería bueno que se legalizara a la izquierda abertzale y se consensuaran con el PP cambios en política penitenciaria, agrupando a los presos en tres o cuatro cárceles, han sido corregidas por altos cargos del PSOE.
El ministro español de la Presidencia, Ramón Jáuregui, le replicó ayer que «no es el momento» de legalizar a Batasuna y reagrupar a los presos vascos. «Debemos tener constancia fehaciente de que los movimientos de ETA son irreversibles y no nos van a volver a engañar, y no tengo esa constancia», manifestó en una entrevista de Catalunya Ràdio.
El consejero de Interior y miembro de la Ejecutiva del PSOE, Rodolfo Ares, también contradijo al presidente del PSE. Negó, en todo caso, que su formación tenga un doble discurso, uno el que se pronuncia públicamente y otro el que lanza Jesús Eguiguren. Ares señaló que la línea del PSE la marca el secretario general y lehendakari, Patxi López, y que en esta materia se ha posicionado ya muy claramente.
Quien se mostró muy crítico con las posiciones de Eguiguren fue el presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, quien afirmó que «Eguiguren suele decir lo que piensa, pero se equivoca. En 2007 también había gente que decía que había que reagrupar presos y dejar que ETA se presentase a las municipales, el Gobierno socialista les dejó y el tema acabó en la T4».
Entre tanto, sigue el debate sobre la legalización de un partido de la izquierda abertzale. El secretario general del Grupo Socialista en el Congreso y miembro del PSE, Eduardo Madina, afirmó ayer que «si sus estatutos cumplen perfectamente rechazando la violencia y si no existen pruebas fehacientes de conexiones de partido con el entramado terrorista», estarán en su derecho de participar en los comicios como cualquier otro partido.
En una entrevista en RNE, Madina afirmó que si la izquierda abertzale aceptara finalmente cumplir con todos los supuestos que exige la Ley de Partidos, «sería una estupenda noticia, tanto como decir que ha roto definitivamente con ETA o que ETA ya no está activa y que anuncia su desaparición», aunque de momento cree que el comunicado del lunes «no ha cubierto las expectativas» y que «la pelota está en su tejado».
El presidente del PP, Mariano Rajoy, insistió en que «ni ETA ni ninguna de sus franquicias se puedan presentar». El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, pidió por su parte a Rubalcaba que deje de lanzar mensajes a Batasuna de que si se separa de ETA podrá estar en los comicios, porque «son lo mismo».
El presidente del EBB, Iñigo Urkullu, declaró que si cumple todos los requisitos legales, tendría que estar en las elecciones. GARA
