Como se pueden imaginar, la prensa española de ayer estaba plagada de artículos y comentarios referidos a la comunicación de ETA. No les aburriré con citas, pero me permito recoger algunas de las más curiosas o significativas. Para que vean que todas tienen el mismo patrón.

Carlos Carnicero, en «El Periódico», se mostraba un tanto exaltado y pedía a gritos: «derrota sin paliativos. Sin ventajas, sin concesiones distintas de las que pueda tener un preso que se quiere reinsertar a partir del arrepentimiento». Verán como va virando su discurso a medida que pasen las semanas. Será interesante observarlo.

En «El Correo Español», Antonio Elorza también mostraba sus temores por la posible legalización de la izquierda abertzale y buscaba un argumento para mantener el apartheid: «al saludar efusivamente de labios hacia fuera el comunicado etarra, Batasuna muestra que el viejo cordón umbilical todavía no ha sido roto». También otro montón de partidos y organizaciones sociales y sindicales de Euskal Herria han «saludado efusivamente» el comunicado. ¿Están todos unidos por un cordón umbilical a ETA? Los nervios traicionan a Elorza.

Y en «La Gaceta» el ya de por sí exaltado Antonio Martín Beaumont lanzaba su soflama: «Si los terroristas quieren reintegrarse en la convivencia democrática deben simplemente reconocer que, además de fracasar, su camino y su fin eran perversos en sí mismos e incompatibles con nuestra democracia. Nadie debe dejarse seducir por estos nuevos cantos de sirena, pues ETA es la misma que ayer, y lo será hasta que no reconozca la vileza de sus actos y no esté dispuesta a que sus miembros paguen sin rebajas sus deudas con la Justicia». Ya ven que hay algo que les preocupa, una sensación de que las cosas no van a discurrir por donde ellos quisieran.

Lo explica mejor el editorialista de «El Mundo», que asegura que «debajo del tablero en el que ETA y el Gobierno mueven las fichas se juega otra partida fuera de la vista». Y de ello extrae una conclusión: «Ese temor a que siga habiendo negociaciones en la trastienda es el que avivó Mayor Oreja al afirmar que la tregua ha sido pactada entre ETA y el Gobierno». No tengo datos, pero muchas y muchos nos alegraríamos.