La Comisión Europea pide ampliar el fondo de rescate
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, propuso ayer ampliar la capacidad del fondo de rescate europeo con el fin de tranquilizar a los mercados de deuda soberana que cuestionan la solvencia de las economías portuguesa y española. Barroso aseguró que la ampliación no está destinada a ningún país en concreto.
GARA | BRUSELAS
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, abogó ayer por ampliar la capacidad del fondo de rescate para países de la zona euro con problemas de financiación como medida para tranquilizar a los mercados de deuda soberana.
Barroso anunció que ya ha iniciado los contactos con los estados miembros para incrementar la cuantía de ese dinero, así como para aumentar sus capacidades para que pueda efectuar actividades distintas a las que fue diseñado.
«Creemos que la capacidad de financiación (del fondo) debe ser reforzada y que el alcance de las actividades debe ser ampliado», dijo Barroso, en una rueda de prensa en Bruselas, recogida por Efe, en la que consideró que estas medidas enviarían «una fuerte señal a favor de la estabilidad en la zona euro y en la Unión Europea».
Aunque reconoció que aún hace «falta una preparación cuidadosa» para hacer esa ampliación, en la que no se efectúen «anuncios que no vayan seguidos de resultados», Barroso estimó que podría haber un acuerdo a comienzos de febrero. Apoyó esta estimación en la disposición mostrada por los estados miembros para «aportar todo el apoyo necesario» a este fondo durante la cumbre de diciembre, en la que también se discutió la posibilidad de dotarlo de la capacidad de comprar deuda de los países afectados por la crisis en los mercados secundarios. Hasta ahora no han alcanzado un acuerdo, sobre todo debido a la resistencia de Alemania, secundada por el Estado francés.
Insuficiente
El fondo de rescate de la zona euro está dotado con 440.000 millones de euros, a los cuales hay que añadir la aportación con cargo al presupuesto comunitario y la contribución del Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, la UE ha reconocido que la capacidad del mismo es menor, debido a que necesita mantener una cantidad de capital para lograr mantener la mejor calificación a la hora de buscar financiación en el mercado. Además, dado el volumen de su deuda, un eventual rescate del Estado español absorbería la totalidad de la cuantía actual del fondo.
«Lo que estamos pidiendo es que se haga efectiva la capacidad del EFSF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, según sus siglas en inglés)», dijo Barroso. Respecto a si la ampliación del fondo está relacionada con la posibilidad de que el Estado español y Portugal apelen al mismo, afirmó que «con esto no queremos dar a entender de ninguna manera que lo utilizaremos para el país A o para el país B».
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, dijo a este respecto que la crisis ha enseñado «que la prevención es preferible a la corrección», por lo que es «mejor dotarse de los instrumentos suficientes para hacer frente al peor escenario posible».
El Tesoro portugués colocó ayer en el mercado 599 millones de euros en obligaciones a diez años a un interés del 6,716%, casi una décima menos que en la última emisión de esas características, en noviembre, y por debajo del nivel del 7% en el que han oscilado esta semana en el mercado los bonos portugueses a largo plazo.
También emitió otros 650 millones de euros a cuatro años a un interés del 5,39%, en este caso penalizados con 1,3 puntos porcentuales más que la anterior colocación, en setiembre, cuando la presión de los mercados sobre Lisboa era mucho menor. El ministro de Finanzas luso, Fernando Teixeira dos Santos, consideró «un éxito» la emisión y reveló que el 80% de la demanda sobre las obligaciones procedió del extranjero, lo que atribuyó a las gestiones del Gobierno con diferentes inversores internacionales en los últimos meses.
La subasta reflejó una menor presión de los mercados sobre Portugal, interpretada también como prueba decisiva para comprobar la confianza de los inversores en la situación financiera lusa. Según el ministro de Finanzas el interés del 6,71 % es elevado, pero «en la actual coyuntura son condiciones de precio aceptables, e incluso favorables, dado el contexto».
El Tesoro español afronta hoy su primera subasta del año, una emisión de entre 2.000 y 3.000 millones de euros en bonos a cinco años, con cierto optimismo tras los resultados obtenidos por Grecia y Portugal en sus respectivas pujas. Estas emisiones y la disposición de Bruselas para mejorar el fondo de rescate, impulsaron a la bolsa española ayer a subir el 5,42%, su mayor alza desde mayo. GARA
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, descartó el riesgo de contagio al Estado español en caso de que el gobierno portugués se viera obligado a solicitar la ayuda financiera europea.
Mientras el Estado español y Portugal arrastran sus economías entre las dudas sobre su solvencia, el Producto Interior Bruto de Alemania creció en todo 2010 un 3,6% en términos interanuales, su mayor incremento desde la reunificación del país en 1991, según informó la Oficina Federal de Estadísticas. La fortaleza de las exportaciones y el notable repunte de la demanda interna son los principales responsables del fuerte crecimiento de la mayor economía europea, que lidera los avances de los estados industrializados y dobla el crecimiento medio de la UE. «Los datos muestran que la gente puede con razón mirar al futuro con optimismo», aseguró el ministro de Economía, Rainer Brüderle, que añadió que el país «se encamina hacia el pleno empleo». GARA