Las primeras jornadas de la segunda vuelta han ayudado a aclarar aún más el panorama de la Premier. Un campeonato lleno de emoción y en el que la igualdad reina en prácticamente todos los encuentros. Botón de muestra es que entre el séptimo clasificado y el último apenas hay diez puntos de diferencia. Un campeonato que entra en su recta final mientras los equipos tratan de dar los últimos retoques a sus plantillas aprovechando la apertura del mercado de invierno.

La cabeza está copada por los dos clubes de Manchester. El United es líder siguiendo la eterna receta de Ferguson. Tranquilidad, solidez y poderío en ataque. Con Rooney algo mermado por diferentes problemas físicos, Berbatov marcha como máximo goleador con catorce tantos.

A pesar de su juego gris, los red devils aún no han cedido ninguna derrota y saben manejar la presión. En febrero retorna la Champions, siendo el desgaste físico una de las grandes preocupaciones de la afición. Futbolistas como Van der Sar, Ferdinand, Scholes o Giggs notan los años. Pensando en el futuro, Sir Alex ya ha firmado al meta danés Lidegaard y en la zaga ha dado oportunidades a Rafael, Fabio y Smalling.

Los mayores problemas están en la medular, ya que el mes de enero cargará sobremanera las piernas de Fletcher y Carrick. No hay que olvidar que Park Ji Sung está jugando la Copa de Asia y que una terrible lesión ha dejado fuera a Valencia.

Le sigue, habiendo disputado dos partidos más, el Manchester City. El fichaje de Dzeko es un mensaje claro a la caza del título, aunque Mancini siempre se ha mostrado prudente en sus declaraciones. A pesar de algunas voces críticas, ha apostado por Hart bajo palos y el entramado defensivo es muy sólido. La retaguardia se muestra segura y el músculo del centro del campo asegura recuperación y trabajo.

Sin un nueve definido hasta la llegada del bosnio, Silva es el jugador encargado de poner la fantasía, mientras que Tévez se convertía en el brazo ejecutor. El Apache es uno de los jugadores más determinantes de la Premier a pesar de sus constantes amenazas de abandonar la disciplina de los sky blues.

El tercer aspirante es el Arsenal. Los gunners son el equipo que propone un fútbol más atractivo para el espectador. Reenganchados de nuevo a la lucha por el título, Wenger ha profundizado en el acento francófono del equipo y ha recuperado a Rosicky. Nasri se ha convertido en una referencia absoluta y el joven Wilshere se ha hecho con un hueco en el once y también en las listas del seleccionador inglés Capello.

El centro del campo es capaz de fabricar un juego de altísimo nivel, pero habrá que comprobar el efecto de disputar los octavos de Champions ante el Barça. Los londinenses entrarán entonces en la fase decisiva del curso, allí donde algunas de sus piezas clave como Arshavin o Van Persie deberán abandonar la irregularidad para catapultar a su equipo.

Síntomas evidentes de desgaste sufre el Chelsea. El conjunto del cuestionado Ancelotti empezó con buen pie, pero una larga racha de malos resultados le ha restado opciones. La plantilla cuenta con una elevada media de edad, aunque hayan irrumpido Sturridge y McEachran. El despido de Ray Wilkins, segundo entrenador del equipo, alimentó el rechazo de los aficionados hacia la gestión deportiva y empresarial.

Mucho más contentos están en la salida de metro de Tottenham. Los spurs están completando una campaña sensacional en Europa y continúan con posibilidades de reeditar el billete para la Champions. Gareth Bale es el mejor jugador de la Premier hasta el momento, mientras que Modric y Van der Vaart se muestran como recursos imaginativos en un campeonato en el que el músculo está muy presente.

La sexta plaza es para el sorprendente Sunderland. Los black cats superan todas las expectativas. Su fortaleza en casa, donde únicamente han cedido una derrota, y el equilibrio del equipo en todas sus líneas son sus claves. El joven Jordan Henderson ha alcanzado la internacionalidad y ya suena para equipos más poderosos en lo económico. Ya han perdido a su delantero Darren Bent, vendido ayer al Aston Villa.

Otro nueve de moda es Andy Carroll. Controvertido y polémico, el jugador del Newcastle encarna el prototipo de «tanque». Fuerte, con buen remate de cabeza y un gran juego de espaldas y con los pies. La formidable dupla que completa con Kevin Nolan está permitiendo a las urracas pasar un año tranquilo en su retorno a la Premier. Igualmente meritorias son las actuaciones de los modestos Stoke City y Blackpool.

La cruz es para los equipos de Liverpool y Birmingham. En cuanto a los primeros, el Everton se ha sobrepuesto a su pésimo arranque y ya está en la mitad de la tabla. Mikel Arteta sigue siendo una de las referencias principales del equipo de Moyes.

Peores sensaciones transmiten sus vecinos de Anfield. La ruptura entre propietarios y afición marcó el inicio de una campaña negra. Los malos resultados provocaron el cese de Roy Hodgson. Una leyenda como Kenny Dalglish ha vuelto al banquillo, pero las victorias no llegan. Los problemas financieros dejan poco margen de las incorporaciones y los que llegaron en verano están siendo grandes fiascos, con Joe Cole como principal exponente. El técnico ya ha echado mano de jóvenes como el escocés Martin Kelly.

Más abajo están los dos equipos de Birmingham. El Aston Villa comenzó la temporada en medio de la tormenta provocada por la dimisión de Martin O'Neill y la marcha de James Milner. El galo Houllier ocupó el banquillo, tratando de revitalizar a los villanos con la inclusión de nuevos talentos como Albrighton o Bannan, con un rendimiento aceptable dentro de un desastre colectivo. Los de Villa Park incorporaron al veterano Pires y ahora llega Bent.

El equipo que porta el nombre de la ciudad arrancó el curso con muchas esperanzas tras el fichaje de Zigic, entre otros, pero tendrá que sudar tinta para mantener la categoría. Un reto para el que han incorporado al ex internacional Bentley.

En la zona de descenso, de momento habitan el Wigan, los Wolwes y el West Ham del reafirmado Avram Grant. Apenas se encuentran a seis puntos de la mitad de la tabla. Todo abierto pues en una competición apasionante en el verde, las gradas y en todo lo que respecta a difusión, mercadotecnia y organización.