Las familias perceptoras de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), (antigua Renta Básica), han aumentado de forma considerable en el último año en Bizkaia. Si en 2009 fueron 36.839 las unidades familiares que se beneficiaron de dicha prestación económica, el año pasado fueron 43.128. Asimismo, en un año se incorporaron 12.323 nuevos perceptores, al tiempo que 4.676 familias la abandonaron por ser autosuficientes, según los datos difundidos ayer por la Diputación de Bizkaia.

Así, a 31 de diciembre de 2010 había un total de 37.935 unidades familiares con expedientes abiertos en RGI, lo que equivale a 72.114 personas, mientras que un año antes eran 32.787 expedientes y 62.295 personas.

En lo referido al perfil de los perceptores de esta prestación, casi el 60% (exactamente el 58,92%) son personas solas. Más concretamente, el perfil principal correspondería a la siguiente descripción: mujer sola, con edad comprendida entre los 25 y los 44 años, sin menores a su cargo y con algún tipo de ingreso. Así, de los titulares de esta renta el pasado mes de diciembre, el 25,44% (9.651) eran pensionistas mayores de 65 años y el 33,85% (12.849) extranjeros.

Por otra parte, entre los perceptores de la Renta de Garantía de Ingresos hay quienes tienen derecho a una Prestación Complementaria de Vivienda para cubrir las necesidades de alojamiento. A través de esta ayuda se cubren gastos de alquiler de la vivienda o alojamiento habitual. En diciembre de 2010 cobraron este complemento específico 9.711 familias.

Empleo y dignidad

Por su parte, el portavoz de la Diputación de Bizkaia, Juan María Aburto, en unas declaraciones difundidas ayer por Efe consideró «fundamental» que los perceptores estén dispuestos a participar en «procesos de empleabilidad». No obstante, matizó que hay un colectivo de personas que «por su situación de deterioro se encuentra en una situación social» que requiere actuaciones más dirigidas al «mantenimiento de su dignidad como personas» y «no tanto hacia el empleo».

Asimismo, dijo que a la Diputación vizcaína no le parece «mal» que Lanbide pase a gestionar esta prestación, que ahora gestionan las diputaciones, pero abogó por el consenso en torno a este asunto en el Parlamento de Gasteiz.