GARA > Idatzia > Kirolak> Futbola

Champions League El Real Madrid empata en un estadio donde siempre había salido trasquilado

Gomis arregla el feo que le hizo Benzema a su ex equipo

El ex delantero del Lyon anotó su quinto gol europeo cuando apenas llevaba un minuto sobre el césped.

p037_f01_199x124.jpg

OLYMPIQUE LYON 1

REAL MADRID 1

Natxo MATXIN

Con los trágicos recientes precedentes sufridos por el Real Madrid en Europa frente al Olympique de Lyon, salir del Gerland empatando a goles podría considerarse un buen resultado. No pensarán igual los aficionados blancos, que vieron a un Real Madrid superior en la segunda mitad, pero maniatado y temeroso en la primera, donde fue superado ampliamente por los locales, que pudieron adelantarse en el electrónico.

Benzema fue inversamente profeta en su tierra -no celebró su quinta diana en Europa-, pero ello no fue suficiente para que los de Mourinho se llevaran la victoria, ya que Gomis, tras una falta al borde del área con rebote incluido, definió con temple solo ante Casillas, para dejar la eliminatoria en el aire, aunque con ligera ventaja para el cuadro merengue por haber anotado fuera de casa.

En lo que fue el discurrir del choque, el Lyon ya llegó con peligro en los primeros compases, mientras que al Real Madrid le costó media hora aproximarse con peligro a la meta de Lloris y sólo a balón parado. Muy bien posicionados, los locales dejaban tocar a los merengues, pero apretaban en el momento en el que los de Mourinho se acercaban a las inmediaciones de los anfitriones.

Con esa presión y una salida velocísima a la contra, el Olympique era quien estaba más cerca de adelantarse en el marcador. Su mejor ocasión, en el minuto 33, vino generada por un error de Casillas, que corrigió de manera inmediata cuando Gomis ya había empalado prácticamente a puerta vacía. El codo del guardameta madrileño evitó el 1-0. Una falta de Cristiano Ronaldo, dos minutos antes, era la más importante por el lado blanco.

Acertado cambio

El Real Madrid salió más enchufado tras el paso por vestuarios -un poste a cargo de Ronaldo y un larguero con cabezazo de Ramos-, pero el marcador no se inauguró hasta que Mourinho movió banquillo. Los aplausos que recibió Benzema cuando saltó a la que había sido su casa durante muchos años los «correspondió» con un gol a trancas y barrancas. Los madrileños tenían encarrilada la eliminatoria, pero se dejaron empatar a falta de siete minutos para el final.

El Chelsea no falló

Los londinenses dejaron prácticamente sentenciada la eliminatoria en su visita al Copenhage (0-2), gracias a la extraor- dinaria pegada de un Anelka que firmó las dos dianas que permiten ahora a los de Ancelotti tomarse con más calma la vuelta, verse casi en cuartos y calmar, de paso, a una hinchada que no está lo que se dice muy contenta con la marcha de los blues en la Premier.

El Chelsea dominó de cabo a rabo el envite frente a la gran sorpresa de los octavos. Al conjunto danés le pesó la responsabilidad de verse en una criba tan avanzada y ante un rival experimentado, que demostró fortaleza y saber estar. El equipo inglés ya pudo dejar finiquitado el pase en la primera parte -dispuso de media docena de claras ocasiones-, pero se estrelló contra Wiland, el mejor de largo de los anfitriones, quien no pudo finalmente contrarrestar la noche enrachada de Anelka.

el Cska pasa ronda

El CSKA de Moscú es el primer equipo en clasificarse para los octavos de la Europa League tras deshacerse del PAOK de Salónica griego. Hoy se disputa el Oporto-Sevilla (Canal +, 18.00), con ventaja portuguesa en la ida, cuando ganó 1-2 en el Pizjuán.

Doble duelo de altura para el cierre

La ida de los octavos de final se cierra está noche con dos choques sumamente atractivos. Por un lado, Inter de Milán y Bayern de Múnich se ven las caras en San Siro (ETB-1, 20.45), un enfrentamiento que supone la revancha de la última final de la Champions, el pasado mayo. Entonces fueron los lombardos, con Mourinho en el banco, los que se llevaron el gato al agua.

Mucho ha llovido desde entonces en el club azul y negro. Aparcada ya la corta era Benítez, la llegada de Leonardo ha enderezado un flojo arranque de campaña. Con Diego Milito lesionado y Pazzini en la grada -no puede jugar Champions porque ya disputó la fase previa con su ex equipo, la Sampdoria-, el peso del ataque recaerá en Eto'o, con Sneijder y Stankovic a su espalda. En la zaga lo más relevante es el retorno de Lucio, tras mes y medio de ausencia.

El Bayern llega a Milán con su artillería engrasada gracias al temible cuarteto formado por Robben, Ribery, Müller y Mario Gómez. Más problemas tiene Van Gaal en la defensa, donde las diferentes probaturas realizadas no le están dando los resultados esperados.

El otro duelo tendrá como escenario el Vélodrome de Marsella, donde Olympique y Manchester United pugnarán por acercarse a los cuartos (Gol T, 20.45). Los dirigidos por el labortano Didier Deschamps, terceros en la Ligue 1, parten como víctimas ante el líder de la Premier. Sin embargo, no conocen la derrota en casa desde setiembre pasado y confían en el acierto ofensivo de hombres como Lucho González o Brandao. Los «red devils» se presentan con las bajas de Ferdinand, Evans, Anderson, Giggs, Owen y Park Ji-sung. Se prevé que el técnico Alex Ferguson sitúe a Smalling y Vidic en el eje de la zaga, forme la dupla ofensiva con Berbatov y Rooney y se guarde al Chicharito Hernández como bala en la recámara. I.I.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo