CRíTICA cine
«Chico & Rita»
Koldo LANDALUZE
Mientras llevaba a cabo la muy decepcionante “El baile de la Victoria”, Fernando Trueba ya estaba inmerso en esta notable propuesta de animación que alterna el trazo clásico y la imagen generada por ordenador. Con la colaboración del diseñador Javier Mariscal, Trueba buscó refugio en los sonidos del jazz latino que tanto le apasionan, y cobró forma esta experiencia sonora y visual que, siguiendo un tempo narrativo similar al de los boleros, pone en escena una crónica de amor imposible protagonizada por un pianista y una cantante que suspira con triunfar en los Estados Unidos. “Chico y Rita” en momento alguno se salta la norma no escrita que tanto inspira al bolero, y recrea en la gran pantalla un crisol de sonidos y colores salpicados por una banda sonora incontestable que nos habla del mestizaje entre los sonidos caribeños y las grandes bandas de jazz que tiñeron de ritmo las vibrantes noches neoyorquinas de los años 40-50. A lo largo del metraje, topamos con perfiles y temas consabidos, suspiros y bailes... lágrimas por un amor no prolongado y siempre esquivo. Es la materia prima de un bolero desgarrado en el que la nostalgia del presente invita a dejarnos llevar a través de un pasado luminoso y habanero que conecta con la grisura que invade la tierra de promisión norteamericana. El movimiento está magníficamente captado, los rasgos de los personajes apenas están perfilados, es un estilo universal que nació de la llamada “Línea clara” que legó el creador de “Tintín”, Hergé. Por el contrario, la arquitectura adquiere una especial relevancia y se convierte en un personaje más dentro de una trama animada por el humo y los sonidos hermanados de Dizzy Gillespie, Charlie “Bird” Parker, Nat King Cole y la orquesta del Tropicana. “Chico y Rita” es emoción cinéfila; un claro homenaje a los clásicos del cine de los años 40 y, sobre todo, un guiño sentido hacia el pianista cubano Bebo Valdés, cuya sombra recorre el Malecón y se desliza por la escenografía humeante de los club nocturnos de jazz.