Miles de personas se manifestaron ayer en el norte de Nicosia, capital de Chipre, para protestar por la injerencia de Turquía en el norte de la isla y contra el plan de austeridad impuesto a la zona, que depende económicamente de la ayuda de Ankara. El norte de Chipre quedó paralizado por la huelga general convocada por los principales sindicatos turco-chiprio- tas y partidos de la oposición.

Los transportes, los servicios y la actividad económica del norte de la isla quedaron suspendidos durante la protesta contra lo que muchos turco-chipriotas ven como una amenaza a su identidad, informó Efe.

La movilización de ayer siguió a la llevada a cabo el pasado 28 de enero contra el plan de austeridad económica aprobado por Turquía y la denuncia de la masiva presencia de colonos turcos en la zona, ocupada por tropas de Ankara en 1974.

La concentración realizada ayer en Nicosia reunió, según los sindicatos, a 50.000 personas, que corearon consignas denunciando las medidas adoptadas para denunciar las medidas con las que se pretende sanear el presupuesto de la República turca de Chipre del norte (RTCN, reconocida solamente por Turquía).

Los manifestantes agitaban banderas hostiles hacia Turquía y pedían el fin de la ocupación turca, pese a las advertencias de las autoridades locales, preocupadas por no disgustar a Ankara que ya mostró su descontento tras la protesta del 28 de enero.

El partido gubernamental turco (AKP) «continúa su política para erosionar cultural y socialmente a los turco-chipriotas, para empobrecer a los trabajadores y para desplazarnos de nuestro país, usando las mezquitas y la propaganda religiosa», declaró a Efe Sener Elcin, secretario general del sindicado KTO.

Tras la protesta de enero, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, reaccionó recordando el importante apoyo financiero de Ankara a la RTNC: «Les alimentamos y dicen que nos vayamos. ¿Qué pretenden?».

La movilización antiturca ha tensado las relaciones entre Ankara y la RTNC, que ha intentado calmar la situación empleando excusas, lo que no ha impedido que Turquía retire a su representante diplomático allí para sustituirlo por un tecnócrata que no es otro que quien coordina la ayuda financiera turca y quien recomendó austeridad.