La Ertzaintza pidió a «Tarta» datos sobre el Partido Popular en Gasteiz
Las incursiones políticas de Jesús María Fernández Benito, «Tarta», resultaron también de interés para la Ertzaintza. La Policía autonómica le encargó en junio de 2006 «seguir con el tema de PP en Gasteiz», según consta en la información remitida al Juzgado de Instrucción número 4 de Gasteiz. Un año después, la Ertzaintza se interesaría también sobre Innovación Democrática, partido del que Fernández Benito fue candidato a JJGG aunque la lista no prosperó.
Iñaki IRIONDO | GASTEIZ
Al ex miembro del ABB Aitor Telleria le encontraron en el ordenador algunas fichas con datos sobre determinadas personas alavesas que parecían provenir de los archivos de la Ertzaintza. Jesús María Fernández Benito, Tarta, aparecía en esas fichas, por lo que el juez le tomó declaración como afectado, al tiempo que exigió a la Policía autonómica los informes en los que éste figurara.
Esta documentación, a la que ha tenido acceso GARA, demuestra que la Ertzaintza solicitó a Fernández Benito información sobre el PP en Gasteiz. Según consta en esos informes, el agente 53888 se reunió el 8 de junio de 2006 a las 21.00 horas con CK95 («clave de fuente» de Fernández Benito) para hablar sobre «conversaciones en la Guardia Civil». Durante la cita, el ertzaina la marcó a Tarta como objetivo «seguir con el tema de la GC y de PP en Gasteiz».
Jesús María Fernández Benito, -al que se le conoce también con los sobrenombres de Txusma y Jeje- fue el número 2 de la candidatura del PP en Bergara en 2003 y ha reconocido públicamente sus buenas relaciones con este partido.
Sin embargo, en 2007 Fernández Benito se unió a las filas de Innovación Democrática, un partido con ex miembros de UA y personas cercanas al Foro Ermua que fracasó estrepitosamente. Tarta figuró en la candidatura a JJGG por Gasteiz. La Er- tzaintza también le solicitó información sobre este partido.
«Servir al País Vasco y España»
Tras haberse jubilado, Jesús María Fernández Benito vive fuera de Euskal Herria desde marzo de 2010. Su biografía resulta muy peculiar. Comenzó a colaboraron con los servicios militares de la dictadura en 1963 y trabajaba en el Gobierno Civil de Bizkaia. En 1981, Luis María Retolaza lo fichó para la puesta en marcha de la Ertzaintza, a pesar de conocer sus antecedentes.
En 1991, Juan María Atutxa lo alejó de Interior, donde había sido jefe de operaciones de Protección Civil, y pasó al Servicio de Meteorología. De allí lo mandaron a un puesto «vacío de contenido» en Presidencia.
Pese a estar fuera de Interior, siguió haciendo misiones de enlace entre la Unidad de Investigación y Análisis de la Ertzaintza, y las FSE y el CNI. Esto supone que lo mismo informaba a la Policía autonómica sobre movimientos en la Guardia Civil, que transmitía los servicios secretos españoles datos sobre el lehendakari Juan José Ibarretxe y el PNV.
En una entrevista que publicó «El Mundo» el pasado 18 de enero, le preguntaron si era «una especie de colaborador doble» y su respuesta fue que «no, en absoluto. Yo siempre he estado en la lucha antiterrorista». Añadía que nunca había cobrado por estas labores. «Sólo me cabe la satisfacción de haber servido al País Vasco y a España», decía.
De la documentación sobre las relaciones de la Ertzaintza con sus confidentes se extrae el dato de que la Policía autonómica tiene la costumbre de regalar una caja o set de vino a sus «fuentes» como regalo de navidad.
El director del Centro Nacional de Inteligencia, Félix Sanz Roldán, comparecerá hoy ante la comisión de control de los créditos destinados a gastos reservados del Congreso para aclarar el supuesto espionaje al ex lehendakari Juan José Ibarretxe por parte de Jesús María Fernández Benito. En su declaración ante el juez, afirmó que había aprovechado su estancia en Presidencia para «vigilar un poquito a Ibarretxe y compañía». Según explicitó, «yo fundamentalmente les servía para ciertas informaciones sobre quién había ido a Cuba con el lehendakari, la lista de pasajeros, qué políticos habían ido con él... Esas cosas, entre otras».
El PNV solicitó la comparecencia de Sanz Roldán el pasado mes de enero tras conocerse el testimonio que ofreció Tarta en el Juzgado de Instrucción número 4 de Gasteiz. El portavoz jeltzale en el Congreso, Josu Erkoreka, expresó su preocupación ante la posibilidad de que los servicios de información del Estado hubieran «podido espiar a la máxima autoridad pública vasca» y exigió depurar todas las responsabilidades a las que hubiera lugar.
La comisión en la que comparecerá el director del CNI tiene carácter secreto, está presidida por el propio José Bono y a ella pertenecen los portavoces de los grupos parlamentarios. GARA
