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Inauguración del Museo San Telmo

El renovado Museo San Telmo consigue abrir antes de la campaña

El alcalde de Donostia, Odón Elorza, decía ayer no entender «a qué viene tanto morbo con la inauguración», cuando «la noticia es que San Telmo se pone en marcha». Lo cierto es que los retrasos que ha sufrido la obra han provocado que la apertura del museo se haya tenido que fijar al filo, en la fecha límite establecida por la normativa electoral.

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Amaia EREÑAGA | DONOSTIA

Mientras unos ultimaban los preparativos del lunch que se ofrecería pocas horas después a los invitados a la inauguración oficial del renovado Museo San Telmo, otros se afanaban en lo que claramente todavía era una zona en obras: vallas alrededor de la ampliada plaza Zuloaga, que da acceso a la entrada principal, y operarios trabajando en las paredes vegetales que marcan ahora tanto su fisonomía. La imagen que ofrecía el Museo San Telmo de Donostia ayer al mediodía, cuando las instituciones citaron a la prensa, era la del trabajo al contrarreloj. La causa, los distintos retrasos que ha sufrido la renovación del museo más antiguo de Euskal Herria: se habló de abrirlo en 2010, luego se fijó la fecha para hace un mes, pero por diferentes motivos (entre ellos, la quiebra de la empresa que llevaba el proyecto museológico) finalmente la campaña electoral se les ha venido encima. Ayer, en el último día permitido por la normativa electoral, se procedía a la inauguración oficial, aunque el museo no abrirá sus puertas al público hasta este fin de semana. Aún así, la apertura de los diferentes espacios tendrá que ser escalonada en el tiempo debido a los flecos que aún quedan por atar, como la preparación de la exposición permanente. De todas formas, los responsables del proyecto, como el concejal de Cultura, Denis Itxaso, quisieron ver este factor -el de la apertura escalonada-, como algo a saber aprovechar para mantener la atención de los posibles visitantes.

Acompañado por la directora general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Ángeles Albert (Madrid es el «socio» que más ha aportado, con la cifra de 9 millones); la consejera de Cultura, Blanca Urgell (Lakua aporta 3 millones), el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y la diputada de Euskara y Cultura, María Jesús Aranburu (3 millones, más otro acuerdo para la creación de un Centro de Patrimonio Cultural), el alcalde de Donostia recorrió lo que parece uno de sus proyectos más queridos. No en vano, el Ayuntamiento de Donostia es el principal inversor, ya que ha aportado 13 de los 28,5 millones de euros que ha costado la renovación (la mayoría, 20,5 millones, en inversión arquitectónica).

Ahora este museo, un pequeño capricho por su coqueto claustro y su colección de estelas funerarias, ha pegado un salto de división: con la renovación y la ampliación sufrida en estos cinco años de obras, junto al aumento de su presupuesto (ha pasado de los 2,5 millones que tenía en 2007 a los previstos 4,7 millones) San Telmo se «reinventa» para transformarse en un centro multidisciplinar centrado en las ciencias sociales y que busca convertirse, con sus más de 11.000 metros cuadrados construidos, en el mayor museo dedicado a la interpretación de la sociedad vasca. Su directora, Susana Soto, apuntaba ayer que lo que busca es convertirlo en un lugar que permita «conocer nuestro futuro, a traves de nuestro pasado». Una especie de lugar desde el que analizar estudiar nuestra cultura y encontrar «las claves de la evolución de la sociedad vasca de nuestros días».

Elorza redundó en este extremo, al apuntar que se inicia una etapa con una visión abierta «pero sin perder sus raíces». Habló de «un espacio lleno de magia», que se abrirá «como un museo de la sociedad vasca y de la ciudadanía» y que servirá también como «foro de debate».

El convento dominico del siglo XVI, base del museo, cuenta ahora con otro nuevo edificio, una ampliación construida en la falda del monte Urgull, que, entre otros servicios (cafetería, salón de actos....) albergará la sala de exposiciones temporales. Allí se prepara la exposición temporal inaugural, que se abrirá al público el próximo sábado. Es «6 millones de Otros», una muestra audivisual realizada por el prestigioso fotógrafo Yan Arthus-Bertrand, conocido por sus fotos aéreas, y que ha realizado para la fundación Good Planet en colaboración con los artistas Sibylle d'Orgeval y Baptiste Roget-Luchaire. En ella, se reflexiona en torno a la esencia de los seres humanos.

En septiembre, coincidiendo con el Festival de Cine, llegará la exposición «Federico Fellini, El circo de las ilusiones», de La Caixa, y a mediados de diciembre está prevista «A propósito del arte vasco», una muestra todavía en proceso de elaboración, centrada en la corriente artística surgida en la escultura vasca a partir de la década de los años ochenta.

público

El museo se abrirá esta semana a grupos especializados. El público podrá asistir en las jornadas de puertas abiertas del sábado y domingo en la que se podrá ver la exposición inaugural, gratis. Habrá que esperar para verla permanente.

sin franquicia

«Es un museo de sociedad y ciudadanía. No hay modelos parecidos, esto no es una franquicia de nada y espero que alcance fama en Europa», afirmó el alcalde, Odón Elorza.,

Antiguas pinturas y nuevas imágenes en la iglesia

Entre los descubrimientos destacan los vestigios de antiguas pinturas de finales del siglo XVI, halladas en la iglesia y que habían estado cubiertas hasta la presente rehabilitación. Todavían sin terminar de restaurar, cubren las paredes este lugar donde, además, el público podrá ver el montaje audivisual «Los desafíos de nuestra sociedad», que analiza mediante proyecciones interactivas de luz y sonido cuestiones como la sostenibilidad. Realizado gracias a la participación de personas de toda Euskal Herria, cuenta con el texto y la voz de conocidos escritores vascos, como Harkaitz Cano, o la música de Mikel Laboa.

La eliminación de añadidos ha sacado a la luz hallazgos inesperados

Con la rehabilitación, lo que se ha conseguido también es recuperar los volúmenes originales de este antiguo convento dominico al eliminarse estructuras que habían sido añadidas en una reforma realizada en 1932 y que habían modificado la estructura original. Se incorporó un cuerpo grande encima de las capillas, que modificaba la visión de la nave lateral de la iglesia desde otros puntos de la Parte Vieja. Los arquitectos, de hecho, se muestran orgullos de que «con su desaparición, ha hecho recuperar la nave de la iglesia y su presencia en la ciudad». Asimismo, han aparecido restos arqueológicosy criptas antiguas, una de las cuales es posible que pueda restaurarse.

Una pared vegetal que funde el museo con el monte Urgull

Además de recuperar el edificio original, uno de los objetivos de los arquitectos autores del proyecto, Nieto Sobejano Arquitectos, era que el espacio que se ganase se fundiese con Urgull. De hecho, ahora el acceso al monte se realiza desde San Telmo y los «muros habitados» de la nueva edificación, que alberga la zona de acogida, la biblioteca, el salón de actos y las nuevas salas de exposición temporal, se han convertido en un «muro cambiante» que minimiza el impacto visual. Basándose en la imagen de las rocas erosionadas de Urgull, el verde sale de unos paneles de aluminio perforados a modo de celosía, creados por los artistas Agustina Otero y Leopoldo Ferrán.

Una previsión de nada menos que 140.000 visitas en el año inaugural

El museo esperar recibir 140.000 visitas en el primer año de funcionamiento.

La entrada costará cinco euros, aunque quedarán exentos de pagarla los mayores de 65 años y los menores de 18. San Telmo abrirá todos los días salvo los lunes en horario ininterrumpido de 10.00 a 20.00 horas.

De los 4,7 millones de euros anuales en el que está estimado el presupuesto, el Ayuntamiento aportará 3,2 millones y confía en que el 1,5 millón restante pueda sufragarse mediante el ingreso por taquilla, alquiler de espacios y patrocinios tanto públicos como privado, y además se pondrá en marcha la tarjeta de fidelización Socio San Telmo Museoa-DK.

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