«El hobbit», la precuela de «El Señor de los Anillos», en marcha
Después de superar infinidad de contratiempos, el pasado 21 de marzo se inició en Nueva Zelanda el rodaje de uno de los proyectos más esperados de los últimos años, «El hobbit». El cineasta Peter Jackon, autor de la aclamada trilogía de «El Señor de los Anillos», nos guiará nuevamente a través de la Tierra Media que imaginó J. R. R. Tolkien.Koldo LANDALUZE | DONOSTIA
Aburrido de corregir exámenes, un profesor de filología alza la mirada de su escritorio y fija su interés en el paisaje que se asoma desde el otro lado del ventanal de su despacho, en el Pembroke College de la Universidad de Oxford. Observa un árbol frondoso mecido por la suave brisa de esta tarde veraniega de 1929 y, de improvisto, fija su interés en algo que se remueve oculto entre los matorrales. Instintivamente, el profesor John Ronald Reuel Tolkien aparta los exámenes que se apilan sobre su escritorio y escribe en un papel en blanco «En un agujero en el suelo, vivía un hobbit».
Aquella frase, huérfana de contenido, permanece oculta en un cajón durante un tiempo y mientras aguarda ser prolongada, Tolkien elabora el mapa de un lugar llamado Thór, el escenario donde transcurrirá buena parte de su futura novela. Creada la geografía, el escritor retoma la frase y la completa: «En un agujero en el suelo, vivía un hobbit. No un agujero húmedo, sucio, repugnante, con restos de gusanos y olor a fango, ni tampoco un agujero seco, desnudo y arenoso, sin nada en que sentarse o que comer: era un agujero-hobbit, y eso significa comodidad». De esta forma nació «El hobbit», una historia que J.R.R. Tolkien fue leyendo a sus hijos a medida que la iba escribiendo.
Mitologías
Con fluidez y sin pausa, aquel profesor creó un vasto imaginario habitado por un bestiario de criaturas imposibles cuyo origen variado estaba enraizado en muy diversas culturas mitológicas nórdicas. Página a página, somos testigos de un épico viaje iniciático a través de la Tierra Media y que comienza con la llegada a la Comarca de trece enanos liderados por Thorin Escudo de Roble y un mago de larga barba gris llamado Gandalf. Su destino es el agujero-hobbit de Bilbo Bolsón.
La Compañía de enanos requiere de los servicios de un experto saqueador que les ayude a alcanzar Erebor, derrotar al dragón Smaug y recuperar el reino y su tesoro. Seducido por la aventura, Bilbo Bolsón, no dudará en abandonar la placidez de la Comarca para embarcarse en este incierto y accidentado viaje.
Siempre se consideró algo imposible recrear visualmente el fértil imaginario de J.R.R. Tolkien y la mayoría de los intentos se concentraron en plasmar cinematográficamente la secuela de «El hobbit», la trilogía de «El Señor de los anillos». Las dos primeras tentativas recibieron la negativa del propio autor, quien no vio con buenos ojos los cambios sustanciales que figuraban en los guiones. La primera fue auspiciada en el año 1956 por Forrest J. Ackerman y la segunda llevaba la firma del mismísimo Stanley Kubrick, un cineasta rompedor que propuso a los Beatles como protagonistas.
A mediados de los 60, la compañía United Artist quiso que John Boorman («Excalibur») rodara una versión con personajes reales, pero fue finalmente Ralph Baskhi quien llevó a la gran pantalla la primera entrega de «El Señor de los anillos» utilizando la técnica de animación denominada Rotoscopio: personajes reales que son transformados en dibujos animados. Finalmente, en el año 95, un visionario neozelandés llamado Peter Jackson logró convencer a los responsables de Miramax para que le dejaran dirigir las tres entregas del original literario de Tolkien.
El resultado fue un éxito sin precedentes que, inevitablemente, ha propiciado el rodaje de «El hobbit». A excepción de las precuelas de «La guerra de las galaxias», nunca antes el cine había vivido con tanta expectación el desarrollo de un proyecto. La cronología de este rodaje, iniciado el pasado día 21, ha provocado una auténtica riada de comentarios y conflictos generados por los derechos de distribución del original literario.
El origen se remonta al año 1995, cuando el propio Peter Jackson y Fran Walsh propusieron a los todopoderosos hermanos Harvey y Robert Weinstein de la Miramax el rodaje de «El hobbit» y «El Señor de los anillos». La idea inicial fue rodar «El hobbit» y si esta tenía éxito, rodar la trilogía. Se pusieron en contacto con Saul Zaentz, quien tenía los derechos de ambas obras. Las conversaciones se prolongaron y surgió el inconveniente de que Zaentz tenía los derechos de producción de «El hobbit», pero no de su distribución la cual pertenecía a la United Artist. Los Weinstein, impacientados, le dijeron a Jackson que iniciara el rodaje de «El Señor de los Anillos».
En el año 2006, la Metro Goldwyn Meyer -poseedora por entonces de la United Artist- propuso a Peter Jackson y a New Line una asociación encaminada a trasladar a la gran pantalla «El hobbit» lo que dio como resultado una serie de enfrentamientos judiciales dignos de figurar en la batalla del abismo de Helm. Finalmente, el cineasta mexicano Guillermo del Toro («El laberinto del fauno»), un auténtico especialista a la hora de plasmar lo fantástico en la gran pantalla, fue el elegido para llevar a cabo este proyecto. El propio Peter Jackson, relegado a un segundo término pero siempre vigilante, dio por buena esta elección.
Mitologías
Del Toro se puso manos a la obra de inmediato y tal y como quiso en su origen Jackson, decidió incluir en el guión diversos pasajes que no figuran en el libro, pero que Tolkien incluyó en otros escritos. Respiró aliviado en cuanto Ian McKellen (Gandalf), Andy Serkis (Gollum) y Viggo Mortensen -cuyo personaje Aragorn no aparece en el relato original, pero sí en varios apéndices- confirmaron su presencia en las dos entregas de las que consta el proyecto.
En el año 2008, Christopher Lee anunció que su edad, 88 años, le impedía llevar a cabo un viaje a Nueva Zelanda, lugar en el que se desarrolla el rodaje, pero que le gustaría prestar su voz al dragón Smaug. Finalmente, un vistazo a los títulos de crédito que todavía quedan por definir en su totalidad, nos descubre que Christopher Lee volverá a encarnar al mago Saruman y que la voz del Smaug pertenecerá con toda seguridad a Leonard Nimoy, el recordado Mr. Spock de la saga «Star Trek».
Los graves problemas financieros por los que atraviesa la MGM provocaron un prolongado retraso en el inicio del rodaje y, tras estar dos años involucrado en el proyecto, Guillermo del Toro renunció a dirigir un proyecto que se tambaleaba constantemente. Finalmente, la Warner Bros retomó la producción, confirmó los papeles protagonistas -Martin Freeman (Bilbo Bolsón), Richard Armitage (Thorin) y James Nesbitt (Bofur)- y Peter Jackson anunciaba que retoma las riendas y asume la dirección respetando las directrices que originalmente marcó Guillermo del Toro, cuyo nombre figurará como co-guionista junto a los de Fran Waltz, Philippa Boyens y el del propio Jackson. Rodadas en IMAX y 3-D, las dos entregas de «El hobbit» se estrenarán respectivamente en diciembre de 2012 y diciembre de 2013.