Antoine Griezmann se colocó con los dos goles que marcó el domingo en la 22ª posición de la clasificación de goleadores, sólo superado por veinte delanteros de gran nivel y Diego Castro, único media punta que le aventaja en la relación gracias a los penaltis que ha transformado.

Griezmann no ha marcado ningún gol ni de penalti ni de falta, una faceta, la de la estrategia, en la que sí puede mejorar mucho. Dentro de un nivel irregular como corresponde a un jugador genial, ha habido una faceta en la que ha destacado. Su llegada desde atrás a posiciones de remate, lo que ha provocado que ya sea el mejor goleador realista y esté cerca de un Top 20 en el que no hay lugar para mediocres. Rondón y Caicedo son los únicos debutantes junto a él en esa relación y con sus veinte años recién cumplidos es el más joven con un año y medio menos que el delantero venezolano del Málaga.

Porque para valorar el mérito de Griezmann basta con repasar a los goleadores que tiene por delante. Messi, Cristiano Ronaldo, Villa, Fernando Llorente, Rossi, Agüero, Negredo, Pedro, Soldado, Rondón, Caicedo, Nilmar, Trezeguet, Benzema, Kanouté, Osvaldo, Aduriz, Diego Castro, Manu del Moral, Forlán y Luis Fabiano son los únicos que llevan al menos ocho goles.

No es fácil marcar siete goles en Primera para nadie, y menos para un debutante y un jugador tan joven, pero desde que Lasarte tuvo que recurrir a él se ha destapado en la faceta goleadora. Fue el máximo realizador de la pretemporada realista 2009-10 y marcó seis goles importantes para el ascenso. Esta temporada sus goles, a excepción de los del domingo, no han tenido tanta importancia, pero tienen más mérito porque se enfrenta a defensas de mayor nivel y los ha logrado en menos partidos.

Griezmann se ve beneficiado de la forma de jugar de la Real, que busca la otra banda de manera sistemática y él sabe buscar bien los centros que llegan desde allí. A pesar de que Xabi Prieto y Carlos Martínez no jugaron un buen partido, fueron los que mandaron al área los dos balones de los goles y el de Mâcon demuestra una intuición especial para sorprender por detrás y adelantarse a los defensas. La jugada del primer gol es la que mejor domina. Además tiene el instinto que lleva a buscar el balón allá donde puede caer.

Esos movimientos, la falta de más nivel en el interior zurdo y la presencia de Zurutuza en la media punta motivan que Lasarte prefiera colocarlo en banda pese a que él desee jugar tras el delantero. El año que viene, con la previsible llegada de Barkero cuando acabe contrato en Soria, habrá más opciones en los dos puestos y se verá dónde se puede sacar más partido a un jugador que si es inteligente y lo asesoran bien y sabe manejar todo lo que le rodea debe ser muy importante para este club.