
Hungr�a aprueba otra Constituci�n sobre cimientos ultraconservadores
No se preve�an sorpresas en la votaci�n al texto constitucional propuesto por el Gobierno de Viktor Orban, dado que su partido posee la mayor�a suficiente en el Parlamento para llevar a buen puerto todo lo que se proponga. Los votos en contra de una parte de la oposici�n y el boicot de otra hicieron posible que la nueva Carta Magna, que entrar� en vigor el 1 de enero del 2012, fuese aprobada entre acusaciones de �traici�n a la rep�blica�.
GARA |
El primer ministro de Hungr�a, Viktor Orban, ha tardado exactamente un a�o en ejecutar las modificaciones constitucionales que prometi� nada m�s ganar los comicios legislativos; y teniendo en cuenta que su partido, la Federaci�n de J�venes Dem�cratas �Fidesz�, controla dos tercios del Parlamento, lo ha hecho sin tener que superar grandes obst�culos. As� pues, con 262 votos a favor y 44 votos en contra, Hungr�a posee ya una nueva Constituci�n, dejando de lado la Carta Magna vigente desde 1949. De ese modo, el ejecutivo de Orban da por culminado el �proceso de democratizaci�n� puesto en marcha �con la ca�da del r�gimen comunista� y consolidado el a�o pasado con la victoria frente a los socialdem�cratas h�ngaros.
Tras la votaci�n, el presidente del Parlamento, Laszlo K�ver, no dud� en mostrar su estusiasmo; �vivimos un momento hist�rico�, declar�, al mismo tiempo que animaba a los parlamentarios a cantar el himno nacional. Acto en el que no particip� la mayor�a de la oposici�n, que ve en el nuevo texto la intenci�n del primer ministro de eternizarse en el poder.
El responsable socialista Attila Mesterhazy, por su parte, asegur� que la propuesta de los ultraconservadores recorta garant�as sociales y civiles a los ciudadanos, y calific� la Constituci�n de �verdadera traici�n a la rep�blica h�ngara�. �Utilizaremos todos los instrumentos dem�craticos que est�n a nuestro alcanze para modificar la �Constituci�n Orban��, reiter� Mesterhazy.
Tampoco particip� en la votaci�n el partido de izquierda liberal-verde LMP, no dispuesto a participar �en la patra�a sin escr�- pulos organizada por los neofascistas�. Sin embargo, s� estuvieron presentes en el hemiciclo los diputados de extrema derecha del Movimiento para una Hungr�a Mejor -Jobbik-, que considerando el texto como �demasiado ef�mero�, optaron por votar en contra.
Aunque la propuesta haya logrado superar la prueba del Parlamento, a�n le falta una firma; la del presidente del pa�s, Palo Schmitt. Previsto que as� ser�, la nueva Carta Magna entrar� en vigor el 1 de enero del 2012.
Derechos vulnerados
Cuando llegu� ese d�a, seg�n reiteran diferentes asociaciones de derechos humanos, �numerosos cuidadanos ver�n sus derechos plenamente vulnerados�; as� lo demuestra, aseguran, las bases en las que se sustenta la nueva Constituci�n: dios, la Corona h�ngara, la patria, la cristiandad y la familia tradicional. Proh�be, entre otras cosas, tanto el matrimonio homosexual como el aborto, dado que �la vida del feto debe de ser protegida en todo momento�. M�s pol�mica si cabe ha sido la aceptaci�n de la normativa que restringe la actuaci�n de prensa o el otorgamiento de la nacionalidad a las minor�as h�ngaras en pa�ses vecinos, hecho que le provocar� a Budapest alguna desavenencia con otros pa�ses.
Varios grupos del Parlamento Europeo pidieron ayer la revisi�n de la nueva Constituci�n h�ngara, al considerar que las bases pueden ir en contra de los principios b�sicos de los derechos fundamentales.
La poblaci�n roman� residente en Hungr�a no esconde su terror y consternaci�n frente al acoso constante al que vienen siendo testigos �ltimamente, ante el repunte de los �grupos de vigilancia� de extrema derecha. S�mbolos nazis en mano, miembros del grupo �Un Futuro m�s Brillante� se han hecho notar estas �ltimas semanas en la ciudad de Hajduhadhaz, a 250 kil�metros de Budapest, en la que la comunidad roman� es mayor�a; se concentran y corean el himno nacional del pa�s, a la vez que intimidan a las etnias gitanas para que se marchen del pa�s; abogan, entre otras cosas, por �la construcci�n de una Gran Hungr�a� arremetiendo contra los que consideran �for�neos�.
El pueblo gitano de los roma, adem�s, no ve ning�n salvavidas al que agarrarse, ya que con la aprobaci�n de la nueva Constituci�n, piensa que estas pr�cticas neonazis se ver�n beneficiadas y multiplicadas. El Gobierno h�ngaro ha querido guardarse las espaldas ante una posible cr�tica oficial desde instancias europeas, mostr�ndose dispuesto a que observadores externos analicen el texto constitucional para certificar que se adapta a los valores de la Uni�n Europea.
Sin embargo, la mayor dificultad a la que se enfrentan las autoridades es la que muestra la sociedad h�ngara, que seg�n revelan las encuestas, se muestra en un 57% contraria a que un s�lo partido, sin consenso de la oposici�n, redacte la Carta Magna que rige el pa�s. GARA