El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció ayer que Yemen tiene el mayor número confirmado de niños muertos o heridos de los países donde se han registrado levantamientos ciudadanos contra los regímenes autoritarios.

Entre el 18 de febrero y el 28 de marzo, al menos 26 niños fueron abatidos, principalmente por disparos, detalló la portavoz del organismo, Marixie Mercado, citada por Efe.

«Treinta y seis niños resultaron heridos por municiones de guerra, 47 sufrieron violencia física durante las protestas, lo que incluye algunos golpeados con palos o piedras, y 663 fueron expuestos a gases lacrimógenos», sostuvo.

Por otra parte, al menos tres personas perdieron la vida y otras cinco sufrieron heridas de bala ayer después de que la Policía yemení disparara al aire cerca de manifestantes antigubernamentales que habían instala- do barricadas de neumáticos ardiendo en la ciudad de Taiz, al sur de Sana'a, según fuentes médicas consultadas por AFP, que precisaron que cientos de personas fueron atendidas tras haber inhalado gases lacrimógenos empleados por las fuerzas de seguridad.

Los manifestantes contra el régimen del presidente, Ali Abdallah Saleh, que lleva 32 años en el poder, parecen decididos a probar los límites de las fuerzas de seguridad tras tres meses reclamando la dimisión del mandatario.