En el entorno rojiblanco, quien más quien menos está haciendo las cuentas de cuántos puntos necesita el Athletic para asegurarse su presencia en Europa la próxima temporada y las ecuaciones de Fernando Llorente quedarían prácticamente resueltas en caso de lograr la victoria el lunes en Cornellá-El Prat. Por ello, el delantero rojiblanco calificó como «una final» el partido que les va a enfrentar al Espanyol, ya que si logra victoria, el equipo rojiblanco habría logrado de manera «casi matemática» su objetivo de alcanzar una plaza continental.

«La siguiente jornada el Espanyol visita el Camp Nou con el Barça jugándose la Liga y por eso creo que sería matemático», valoró Llorente en cuando recordó la ventaja de nueve puntos más el average particular, con sólo doce puntos por disputarse, que pueden conseguir respecto al Espanyol.

El de Rincón de Soto incidió en que a día de hoy el objetivo del Athletic sigue siendo «entrar en Europa» y, pese a reconocer las ventajas de acabar la Liga en quinta posición, que permitirá evitar una de las previas de acceso a la Liga Europa, aseguró que «también sería un logro acabar sexto o séptimo».

Las molestias en el cuádriceps derecho derivadas del golpe recibido hace dos jornadas en Iruñea siguen «dando la lata» a Llorente y le mantienen trabajando a menor ritmo que sus compañeros, aunque no le van a impedir enfrentarse el lunes a un rival al que espera encontrarse «con ganas de demostrar que es un buen equipo. Es cierto que en la segunda vuelta no están tan fuertes como en la primera, pero en casa siguen siendo un rival difícil de doblegar».

En parecidos términos habló el lateral Andoni Iraola, que subrayó que el primer objetivo del equipo es asegurar el puesto para volver a competir en Europa, antes de ponerse como meta acabar en quinta posición para evitar así una de las previas de acceso a la Liga Europa.

El defensa de Usurbil también lleva toda la semana arrastrando problemas físicos, pero tampoco quiere perderse un partido tan importante como complicado ante el Espanyol. «El equipo está preparado sabiendo que enfrente va a haber un rival complicado y que ahora está mejor que hace unas jornadas, pero vamos a intentar dar nuestro nivel y hacer un buen partido», explicó el guipuzcoano.

Guiño al origen

El Athletic Club conmemoró ayer sus orígenes a finales del siglo XIX con el descubrimiento de una placa en la antigua Campa de los Ingleses de Bilbo, en el día en que se cumplieron 27 años del último título de Liga conquistado por el equipo, en la temporada 1984-1985.

El acto se celebró en el actual paseo de Abandoibarra, entre la pasarela Arrupe y el museo Guggenheim, en un espacio colindante con la ría que en la última década del XIX fue la zona portuaria en la que se inició la afición por el fútbol en la capital vizcaina, trasladada entonces por los marineros ingleses. El presidente del Athletic, Fernando García Macua, y el alcalde de Bilbo, Iñaki Azkuna, encabezaron un acto en el que participó también el cónsul británico en la capital vizcaina, Derek Doyle.