La OTAN vuelve a bombardear el complejo presidencial de Gadafi
GARA | TRÍPOLI
La OTAN confirmó que sus bombardeos volvieron a alcanzar en la noche del lunes el complejo presidencial de Gadafi y otros dos objetivos, presentados por los aliados como «centros de mando» del régimen libio. Testigos citados por la cadena qatarí Al-Jazeera aseguraron que también fue alcanzada una sede de los servicios secretos.
Un portavoz del Ejército libio incluyó entre los objetivos bombardeados la Corte Suprema, la oficina del fiscal general del Estado y la sede del Alto Comisionado libio para la Infancia, que habría resultado totalmente destruido.
El secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen, advirtió el lunes de que el tiempo se habría acabado para Gadafi, quien «debe comprender, mejor más temprano que tarde, que no hay futuro para él ni para su régimen».
Mientras Al-Jazeera ofrecía imágenes del supuesto izado de una bandera monárquica opositora en una base aérea en Trípoli, fuentes de la revuelta mostraron su esperanza en que la campaña de bombardeos contra la capital haga cada vez más difícil la subsistencia de sus ciudadanos, forzando a que se levanten contra el régimen.
La batalla de Misrata
Los rebeldes aseguraron haber avanzado una quincena de kilómetros hacia el oeste de Misrata y prometieron que, «si la OTAN hace su trabajo (bombardear), mañana (por hoy) estaremos en Zliten», ciudad situada a 150 kilómetros de Trípoli.
Los rebeldes siguen exigiendo armamento pesado a los aliados, petición a la que Italia habría accedido.