Los resultados cosechados por Bildu en las elecciones forales y municipales, sobre todo los obtenidos en Gipuzkoa, han disparado las prisas entre los impulsores y partidarios de una fusión entre BBK, Caja Vital y Kutxa que desemboque en la formación de un banco.

Las miradas se centran especialmente en Kutxa, donde ya antes de los comicios los favorables al actual proyecto no tenían fácil alcanzar el obligatorio visto bueno de los dos tercios de la asamblea.

En principio, tocaba renovar el 50% de la asamblea en la primavera de 2012. Sin embargo, si el Parlamento de Gasteiz aprueba antes del próximo julio la nueva Ley de Cajas, las asambleas de las tres entidades financieras tendrían que ser renovadas al completo en otoño. Así que esa es la fecha tope marcada en rojo en el calendario.

Aunque en algunos ámbitos se especulaba con la posibilidad de retrasar la tramitación de la Ley de Cajas para ganar tiempo, el portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, aseguró ayer en ETB que se llevará a la Cámara autonómica en junio.

A las entidades fundadoras -Diputación y Ayuntamiento de Donostia- les corresponden veinte consejeros, diez para cada una. En ambas ha ganado Bildu, por lo que el futuro reparto será muy diferente al actual. Lo mismo sucede con los treinta consejeros que eligen los municipios del herrialde.

Una vez completado el actual proyecto de fusión, la renovación de las asambleas sería un tema de mucho menor calado, ya que éstas habrán perdido casi todo su poder en beneficio del nuevo banco, que será quien disponga del negocio y de los clientes.

La llave de Hamaikabat

Resulta llamativo que en estos instantes una de las llaves maestras del «sí» o el «no» en Kutxa la tenga Hamaikabat, merced sobre todo a los siete junteros que ha tenido en la Diputación durante la última legislatura, logrados bajo las siglas de EA antes de la posterior escisión.

En su primera comparecencia en solitario, el pasado domingo, H1! obtuvo en Gipuzkoa 8.667 votos, un 2,49% de las papeletas emitidas. Sin embargo, cuenta en su mano con 13 de los 100 delegados en Kutxa, superando incluso el número de concejales (12) que la ciudadanía le otorgó en todo el herrialde.

PNV, PSE y PP, favorables al modelo propuesto, cuentan con 43 delegados en la Asamblea. Sumados a los de H1! son 56, con lo que faltarían 11 para los 67 necesarios. Con los 20 de la plataforma Banatuz -clientes y municipios de la izquierda abertzale- en contra, el otro bloque decisivo sería el del sindicato CCOO, que cuenta con 10 votos. Los 14 restantes corresponden a Alternatiba (3), EA (3), Aralar (2), Ezker Batua (2), la plataforma de empleados Pixkanaka (2), LAB (1) y ELA (1).

Fusión sí, pero no así

El candidato más votado en las forales, Martin Garitano, subrayó que la coalición no es contraria a la fusión de las cajas y defendió «un sistema financiero público fuerte y potente» que «nos ayudará a salir de la crisis en la que nos han sumergido otros». El cabeza de lista de Bildu apuntó que «la bancarización no es la solución» porque ello supondría, a su juicio, la «privatización de la obra social» de las cajas, aspecto éste que es «lo que les da razón de ser. Habría que rediseñar el proyecto», sentenció.