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CRíTICA alt-country

Brillante y opaca actuación de los vaqueros M Ward y Howe Gelb

Pablo CABEZA

Algo no ha funcionado en los pasos previos al concierto de M Ward y Howe Gelb, primer bolo del Bilbao BBK Live en la ciudad, a su paso por la sala BBK el martes 24, ya que media entrada, incluso para un laborable, no tiene explicación sencilla. Ward posee un currículo admirable y es uno de los nombres mejor tratados por toda la prensa especializada. M Ward, además, es el 50 por ciento de She & Him e integrante de la banda Monsters of Folk. Si se mira la lista de músicos que han solicitado sus aportaciones, los nombres no sólo son numerosos, sino de arrebato: Cat Power, Neko Case, Beth Orton, Bright Eyes, Jenny Lewis, My Morning Jacket...

Por otra parte, la noche contaba con Howe Gelb, de Arizona. Un músico que se aproxima a los cincuenta discos entre obras en solitario, proyectos alrededor de Giant Sand y una memorable lista de colaboraciones.

Ambos son amigos, de hecho «Duet for guitars #2», el álbum debut del californiano M Ward, fue editado en el sello de Howe. Y así se presentaron, como amigos, sobre el escenario. Ward: «Estoy encantado de estar con mi amigo Howe en esta gira». Previamente había salido a escena Howe Gelb, que volvió loco al técnico de luces, pues sólo le agradaba estar a oscuras, en una situación absurda. Howe estuvo simpático, pero sus quejas con los focos fueron más allá de lo coherente.

Howe toca la guitarra con esplendor. Posee estilo, habilidad, juegos, jazz, técnica, variedad... Folk, rock, blues, gospel, alt-country, americana, western... Un privilegiado, en resumen, pero más (des)preocupado por ofrecer un concierto en un bar de cervezas que lucirse en una sala con taquilla. Tocó también el piano, con aproximaciones a Thelonious Monk.

Tras media hora, salió a escena M Ward. Se acercó al micro y saludó. Aplausos y un «gracias», en castellano, que lo habla un poquito. De inmediato, Howe le reprendió con una sonrisa y le dijo: «No, aquí se dice `eskerrik asko'». Y Ward corrigió y repitió: «eskerrik asko».

Ward es un músico que se mueve en un terreno similar al de Howe, pero añade rock and roll. Toca sin púa y juega y percute con su mano derecha como pocos guitarristas. En acordes y fraseando es también muy lúcido. Al final, encadenaron unas cuantas canciones juntos, con «Roll over beethoven» como despedida festiva.

Tras dos horas de show, el poso que nos quedó fue el de una noche deshilachada con muchos tiempos muertos y pianos injustificados en gran medida. En escena, dos enormes músicos, pero la sensación de que se había perdido la oportunidad de escribir uno de los conciertos del año.

Ficha

Lugar: Sala BBK.

Fecha: Martes 24.

Asistencia: Alrededor de 300 personas.

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