Christophe Kern logró ayer el triunfo en la quinta etapa de la Dauphiné con final en Les Gets, un puerto de Segunda con 10,7 kilómetros al 4,7% en el que Bradley Wiggins defendió un maillot amarillo que a partir de hoy estará en juego en las dos grandes etapas alpinas que restan para dilucidar la victoria.

En la primera gran jornada de montaña de hoy se sube en los últimos 45 kilómetros el col du Grand Cucheron (1ª, 16,2 kms. al 5%) y se acaba en el Collet d'Allevard, un puerto de fuera de categoría de 11,2 kilómetros al 8,4%. Wiggins querrá recuperar el nivel dado en la alta montaña del Tour en 2009. Tiene más de un minuto de ventaja sobre Cadel Evans, que se perfila como su gran rival este fin de semana tras las diferencias de la crono.

Protagonismo vasco

La etapa de ayer estuvo marcada por una escapada de McCartney (Radio Shack), que llegó a tener doce minutos de ventaja y fue alcanzado en el inicio de la ascensión final a Les Gets. A partir de ahí lo intentaron corredores vascos como Amets Txurruka, Juanma Garate y David López, pero la tentativa que fructificó fue la protagonizada por Kern a tres kilómetros de meta junto a Tony Martin y Zaugg.

De todos ellos fue el ciclista del Europcar el que aguantó en cabeza para llegar a la línea de meta con siete segundos sobre Nicki Sorensen y nueve sobre un grupo de diecisiete corredores entre los que entraron los principales favoritos y, con ellos, Samuel Sánchez y Basso, que ven cómo mejora su forma conforme avanza la carrera.