BOBADAS ALPINAS
La memoria
Kike DE PABLO
Cuando uno se siente acosado por el Alzheimer, llegan nuevos males llamando a la puerta, que la moderna E. Coli (como de diseño diríamos) acecha. En fin, es como cuando se va a montañas de paises de los llamados Tercer Mundo, en donde, si uno es obediente, hay que pelar la fruta y no tomar vegetales crudos. Los virus al ordenador, las bacterias a la comida y ahora hay que tener cuidado con la vestimenta de montaña. En efecto, en el puerto de Amberes se desencadena alarma radiactiva por un contenedor transportando polvo de turmalina con contenido de Torio, naturalmente radiactivo (25 becquereles por gramo). El producto viajaba a Asia para la fabricación de cerámicas que impregnan diversas prendas de ropa deportiva. Ya la casa francesa de productos de montaña Lafuma ha tenido que retirar del mercado algunas de sus chaquetas y pantalones. La ASN (Autoridad de Seguridad Nuclear) ha recordado que la adición de productos radiactivos y la publicidad comercial basada en su propiedad de «producir iones» está prohibida en estos casos, a pesar de la baja intensidad (en los tejidos examinados de 0,0002 millisievert por hora, muy poco incluso para los que no se cambian de ropa). Vamos que no es Fukushima pero que está prohibido, aunque «no hay problemas para la salud» que dicen siempre. A ver... a ver, ¿qué quería decir yo?, ¡ah, sí! Que el hecho de que ronde el Alzheimer y no me acuerde de cómo es el mundo de la montaña de estos días, no quiere decir que no me acuerde de cómo era hace 20 años.