Final de la NBA
Primer anillo para Dallas, Nowitzki, Kidd y Cuban
El primer entorchado para los Mavericks acerca al título a varios desheredados de la competición.
MIAMI HEAT 95
DALLAS MAVERICKS 105
Izkander FERNÁNDEZ
El anillo más justo en lustros. Quizá desde que Houston Rockets, capitaneados por Hakeem Olajuwon, se llevase dos títulos a mediados de los 90, no había existido una victoria tan gratificante para tanto eterno aspirante a alcanzar la cumbre del baloncesto mundial.
Dirk Nowkitzki, Jason Kidd, Shawn Marion, Predrag Stojakovic e incluso el propietario de los Dallas Mavericks, Mark Cuban, ya tienen su anillo. Historia reciente y viviente de la Liga a la que no le queda demasiado baloncesto que exprimir, aunque todavía durarán unas temporadas. Un puñado menos de malditos para el club de los eternos perdedores. Karl Malone, John Stockton y Charles Barkley entre otros jugadores de una calidad estelar, se retiraron sin éxito. Sin embargo, desde la madrugada del lunes, son menos los afectados. Los desheredados.
Dallas Mavericks se impuso a Miami Heat en el sexto partido de las series finales de la NBA por 105-95 para proclamarse campeón por primera vez en su historia. Lo hizo en el encuentro más desigual de la serie y con una dosis de autoridad que no había mostrado en los cinco partidos anteriores.
Con la perspectiva general que da la serie, es fácil percibir que Dallas ha sido un rodillo ante el que Miami ha hecho esfuerzos por no sucumbir. Sin éxito. Los Heat han demostrado ser una caja de herramientas muy cara, con tres piezas de oro pero con un fondo de armario escaso cualitativa y cuantitativamente. No ha bastado con esgrimir al gran tridente compuesto por LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh.
A Miami Heat le ha faltado sobre todo un base organizador y un pívot con oficio. Seres en extinción en el baloncesto actual más condescendiente con el músculo, la rapidez y la fuerza que con la dedicación, la inteligencia y la visión.
No lo tendrán fácil este verano. No sólo porque no hay jugadores que sobren dentro de ese perfil. La economía de Miami está un tanto encasquillada tras dejarse los cuartos en James y Bosh. Serán muchos los seguidores de Miami que se pregunten para qué tanto derroche y parafernalia si quien al final ha terminado tirando del carro ha sido Wade, con algo de colaboración de Bosh pero con muy poca de un rey LeBron venido a menos según avanzaba la final.
Terry, la base
Fue el escolta reserva de Dallas la base sobre la que se cimentó el cuarto punto de los Mavs. Con un Nowitki grisáceo en los primeros 24 puntos, fue Jason Terry el encargado de echarse el equipo a la espalda.
Y eso que en Miami se las prometían muy felices con un arranque espectacular de James que ponía a su equipo seis arriba. Pero como en los anteriores choques, el ex de Cleveland se diluyó y acabó escondido. Sólo Wade, Chalmers y Bosh pusieron de su parte para que Dallas no rompiese el partido hasta los instantes finales. A falta de siete rozaban los 10 puntos y Miami tiró la toalla.
Nowitzki recogió su merecido primer título y también su merecido primer MVP de las finales. Justo en su peor partido.
Miami tendrá que reestructurar un proyecto hipotecado por el alto sueldo de sus tres principales estrellas.
Dallas Mavericks se proclama campeón tras apalear a Los Angeles Lakers y derrotar con claridad a Miami Heat.