AL CIERRE
Sin argumentos para rebotar
Alberto CASTRO
Los mercados europeos no encontraron ayer argumentos para intentar un rebote sólido que les saque de su desconfianza. Por el contrario, son cada día más las razones para mantenerse alejados de las acciones, y la situación de Grecia, a un paso de proceder a la reestructuración de la deuda, no invita a ser optimistas. Ayer mismo, al cierre de las bolsas, la agencia de medición de riesgos S&P daba por hecha esa reestructuración al degradar la deuda de largo plazo hasta el nivel CCC, es decir que se encuentra ahora a tan sólo tres peldaños de la peor calificación posible, la emisión con incumplimiento declarado. Además, dentro del Estado español, el diferencial con el bono alemán llegó hasta los 260 puntos, aunque después se relajó levemente. De mismo modo, los estados rescatados tampoco consiguen rebajar el coste de financiación a pesar de contar con el apoyo explícito de las autoridades europeas y del FMI. Así las cosas, el Ibex, tras intentar superar los 10.000 puntos por la tarde, dio un íltimo giro y acabó con un descuento testimonial del 0,05%. Hoy saldrá desde los 9.946,20 puntos. El resto de plazas europeas pudo acabar en positivo. Fráncfort ganó un 0,22%, Londres un 0,13%, y París un 0,07%. En el Ibex sobresalió Abengoa (+3,10%), tras anunciar la construcción de una planta termosolar en Chile. Entre los perdedores, Sacyr (-3,50%) y BME (-2,30%) fueron los peores. Todos los grandes, con Repsol (-0,57%) a la cabeza, cerraron a la baja. En París, los mejores fueron Publicis (+2,02%) y Peugeot (+1,86%), que se apoyó en una mejora de recomendación.