LAB, ELA y STEE-EILAS han convocado para mañana un paro de cuatro horas en el consorcio Haurreskolak para exigir «una negociación de verdad, teniendo en cuenta que no negociaremos recortes ni en nuestras condiciones laborales ni en la calidad del servicio educativo». Reconocen que hay recortes presupuestarios que inciden en la calidad del servicio y, lo que es peor, que «la ampliación del servicio de haurreskolak se ha paralizado».

A las 11.00 se concentrarán ante el Ayuntamiento de Bilbo, desde donde partirá una manifestación hasta la delegación de Educación. A raíz de que el pasado lunes la consejera de Educación del Ejecutivo de Gasteiz, Isabel Celaá, comunicase que devolvería el recorte salarial que aplicó al colectivo de Haurreskolak, LAB, STEE-EILAS y ELA han dejado claro que, de nuevo, la consejera toma una dirección incorrecta porque traslada esa decisión antes de haber hablado con las centrales sindicales en la mesa de negociación. «Sobre la decisión de devolvernos el dinero que nos quitaron, subrayamos que ha sido gracias al trabajo y al esfuerzo de todas las trabajadoras del Consorcio Haurreskolak», expresaron en su comparecencia ante los medios de comunicación.

Sin embargo, esa decisión esconde una nueva intención de la patronal del Consorcio Haurreskolak como es que «nos propone negociar los recortes de las trabajadoras. Esto supone incumplir el convenio que tenemos vigente. Además, no se nos puede escapar que el Consorcio es quien decidió no cumplirlo y que, a su vez, quiere firmar uno nuevo».

También exigen a la consejera de Educación que explique «a las trabajadoras, a los sindicatos y a los padres qué quiere decir con eso de que habrá que tomar medidas en el servicio. Estamos hartas, que expliquen con claridad y que dejen de jugar con nosotras».

Las representantes sindicales añadieron que hasta la fecha han utilizado la excusa de que «no había dinero»para llevar adelante los recortes. Pero recordaron a Educación que saben que «para seguir con el proyecto de Consorcio Haurreskolak y ofrecer calidad en el servicio, hay que invertir dinero».

De hecho, recordaron que en 2010 hubo un recorte de 450.000 euros y en 2011 el Gobierno de Gasteiz aportó un millón menos. Esos recortes, consecuencia de la Ley de Modificación de los Presupuestos, han traído como consecuencia «mover plazas fijas con carácter provisional. Es una medida que genera inestabilidad y afecta al proyecto educativo». En centros pequeños, se pasará de tener a los niños de ocho a siete horas. «Tiene una intencionalidad: que los padres acudan a los centros grandes, dejando desprotegidos a los pequeños». También denunciaron que en las jornadas de trabajo no se respeta lo que figura en el convenio y denunciaron que «la ampliación de las haurreskolas se ha paralizado».

Por lo que pidieron al Gobierno de Patxi López que prevea el presupuesto necesario para ofrecer este servicio esencial para miles de familias y que establezca un concurso de traslados para acercar a las trabajadoras a su lugar de residencia para evitar situaciones de riesgo.