La gran cita ciclista de la temporada se encuentra a la vuelta de la esquina. El Tour apura sus últimas semanas antes de que se dé la salida el próximo 2 de julio en el Paso de Gois. Y los aspirantes a llevarse el triunfo final de la «grande boucle» afinan al máximo su preparación para llegar bien a la ronda gala.

Alberto Contador, Ivan Basso, Bradley Wiggins y Alexandre Vinokourov son algunos de los principales actores de la próxima edición. Todos ellos se encuentran estos días en los Alpes estudiando las principales etapas de montaña y la cronometrada final de Grenoble, jornadas que serán decisivas para el podio final de París.

La preparación de cada uno de ellos ha sido y está siendo diferente. Alberto Contador, tres veces campeón del Tour, regresó a su localidad de Pinto con su segundo Giro bajo el brazo. Varios días más tarde, y después de participar en la marcha cicloturista que lleva su nombre, el corredor de Saxo Bank confirmó su presencia en la prueba más importante del año.

Ahora, Alberto Contador se encuentra con algunos compañeros de su equipo, el Saxo Bank, en la estación de esquí de Risoul para ascender esta semana las cimas de los Alpes que se va a encontrar en el Tour.

La edición de este año tendrá dos finales en alto en los Pirineos que pueden influir en la clasificación general, pero parece ser que los Alpes serán el escenario decisivo, con las llegadas en Pinerolo (Italia), Alpe D´Huez y Galibier (Estado francés).

El de Pinto preparará sus piernas en puertos como el Agnello, Lautaret y el Galibier, además de hacer el recorrido de la contrarreloj de Grenoble que se disputará el penúltimo día, antes de llegar a París, y que será la misma que en la Dauphiné.

Por último, Contador ultimará su preparación en los Campeonatos de España, que se disputarán en Castellón entre el 23 y 26 de junio antes de afrontar su reto de ganar el cuarto Tour.

Basso, Wiggins y Vinokourov

En esa preparación de los Alpes, el corredor español podría cruzarse por las carreteras con algunos de los que serán sus rivales en la ronda gala, como el italiano Ivan Basso, del Liquigas, que se entrena en aquellos parajes después de haber participado en la Dauphiné.

El doble vencedor del Giro se encuentra con su compañero polaco Maciej Paterski y el director Stefano Zanatta. El varesino recorrió los últimos 40 kilómetros de la decimonovena etapa, que incluye el Galibier y el ascenso final al Alpe D´Huez. También tiene previsto hacer 100 kilómetros de la etapa 17 entre Gap y Pinerolo, con ascensos a Montgenevre, Sestriere y Pramartino. Ya en Italia, subirá algunos puertos más: el Coll dell´Agnello y el Col d´Izoard.

Por su parte, el británico Bradley Wiggins, reciente ganador de la Dauphiné Liberé, pasará unos días en Sestriere. La montaña no es su punto fuerte, pero quiere mejorar la cuarta plaza de 2009. No será su primera concentración en altura, ya que anteriormente estuvo en el Teide.

Las carreteras de los Alpes las completan los corredores de Astana, con Alexandre Vinokourov al frente tras su tercer puesto en la Dauphiné. El lugar elegido del conjunto kazajo es Saint Moritz, en Suiza, donde se han concentrado diez corredores.

En el Tour las piernas pueden flaquear en cualquier momento, pero este grupo de favoritos no podrá poner ninguna excusa, ya que al menos conoce el terreno que puede ser determinante.