La Comisión Europea (CE) está dispuesta a adelantar la entrega de parte de los fondos estructurales que corresponden a Portugal con el objetivo de «relanzar el crecimiento», según manifestó el presidente del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso.

Esta modificación «consistiría en adelantar algunos programas para que puedan dar resultados más inmediatos. La tasa de crecimiento en Portugal es relativamente mejor que en otros países, pero siempre es posible tener resultados más inmediatos en términos de apoyo del crecimiento a través de una reprogramación», defendió.

En todo caso, el presidente de la CE consideró que el crecimiento no se logra únicamente a través de «medidas de estímulo» e insistió en la consolidación fiscal.

«Cada euro que los portugueses pagan para refinanciar la deuda es un euro que no va a sanidad, educación y bienestar», enfatizó Barroso, quien aseguró que reducir la deuda y el déficit «es la medida más social», pues sólo así se recupera, a su juicio, la confianza de los mercados y se crean las condiciones para el crecimiento y la generación de empleo.

Por su parte, el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, aseguró que su país cuenta con las condiciones necesarias para garantizar que el programa de asistencia financiera sea «un éxito».

«Sólo quiero decir que Portugal está agradecido de haber recibido la ayuda de los socios europeos en estos momentos difíciles», sentenció.

Suben los intereses

Mientras, los intereses que penalizan la deuda de Portugal a 2 y 3 años alcanzaron récords de la última década y cotizaron al 13,95% y el 15,04%, respectivamente. Los analistas lo atribuyeron a la percepción de riesgo de que la situación griega contagie a Portugal. En el plazo a 10 años los títulos portugueses llegaron al 11,33% y en el de 5 se situaron en el 13,43%.