CCOO denuncia presiones de Banca Cívica a la plantilla por la próxima OPS
Delegados de CCOO se concentraron ayer ante la sede central de Caja Navarra en Iruñea para denunciar las presiones y amenazas que, según denunciaron, está ejerciendo el grupo Banca Cívica sobre la plantilla ante la próxima oferta pública de suscripción de acciones (OPS).GARA |
Según explicó el secretario territorial de CCOO de Nafarroa, Juan Eseberri, desde principios de junio prácticamente toda la plantilla prolonga su jornada «por encima de las tres y cuatro horas diarias» y además este pasado fin de semana una parte ha tenido que trabajar «sábado y domingo», lo que se podría repetir de nuevo en julio.
Reconoció que, en este momento, ante una «situación excepcional», puede ser necesario «un esfuerzo» adicional, pero si es así CCOO reclama que se negocien las «contraprestaciones».
Según Eseberri, estas presiones tienen su origen en «la necesidad de colocar la oferta pública de suscripción de acciones» para la ampliación de capital, lo que, además, advirtió, puede ser visto por los clientes que en fin de semana reciben una llamada como una situación «un tanto desesperada».
Añadió que se trata de «una orden» dada el viernes por la dirección de Banca Cívica, «más generalizada en Canarias, Barcelona y Andalucía», aunque también ha afectado a Nafarroa, y ello a pesar de que el 16 de junio el responsable de Recursos Humanos del grupo manifestó «con mucho cinismo» que se podría realizar el trabajo «sin recurrir» a este tipo de medidas.
Sin embargo, apuntó que a juicio de CCOO «la razón principal de todo este nerviosismo que se respira» no es tanto que haya problemas para la capitalización de Banca Cívica, sino «una pelea entre directivos» de «los distintos territorios», Nafarroa, Andalucía, Burgos y Canarias, para «demostrar quién es el que consigue más objetivos» y es «el más capacitado».
Visto bueno de la CNMV
De hecho, Banca Cívica prevé registrar el folleto de su salida a bolsa en los primeros días de esta semana, con lo que los inversores podrán empezar a emitir órdenes de compra de acciones. Así, está previsto que la oferta pública de suscripción de acciones reciba el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) antes de mañana, para que pueda lograr su objetivo de salir a bolsa a mediados de julio.
Algunas fuentes, sin embargo, estiman que la CNMV podría no aprobar el folleto de la OPS de Banca Cívica hasta la próxima semana, por lo que la salida a bolsa podría demorarse hasta la segunda quincena de julio.
Ello se debe a que la CNMV podría dar su visto bueno al folleto de Bankia antes que al de Banca Cívica, en contra de las previsiones iniciales de sus responsables, que pretendían hacer su debut en bolsa poco antes que el de Bankia. Pero todo parece indicar que al final no va a ser así.
Ante la inestabilidad del mercado, se espera que Banca Cívica ofrezca una amplia horquilla para fijar el precio de sus acciones y que el tramo minorista, al que destinará cerca del 60% de la oferta, sea el que ayude a minimizar los descuentos que pedirán algunos inversores institucionales.
La inversión mínima de un particular se espera que sea de al menos 2.500 euros.
En cuanto a los descuentos, en el caso de Banca Cívica, que aspira a captar casi 1.000 millones, la rebaja final podría ser de entre el 30 y el 40 por ciento.
CCOO reconoce que, en este momento, ante una «situación excepcional», puede ser necesario «un esfuerzo» adicional, pero si es así reclama que se negocien las «contraprestaciones».
El sindicato atribuye esta situación a «una pelea entre directivos» de «los distintos territorios», Nafarroa, Andalucía, Burgos y Canarias, para «demostrar quién es el que consigue más objetivos».
Está previsto que la oferta pública de suscripción de acciones reciba el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) esta semana para que pueda lograr su objetivo de salir a bolsa a mediados de julio.
El secretario general de CCOO-Euskadi, Unai Sordo, advirtió ayer de que la central que dirige «no tiene clara» su postura respecto a la fusión de BBK, Kutxa y Vital y aseguró que su apoyo no será gratis. «Hay muchas cosas de las que discutir», dijo.
En una entrevista en ETB, el líder sindical recordó que en su día CCOO apoyó una posible fusión entre las cajas vascas «cuando no se hacía en estos parámetros de bancarización».
Sin embargo, en la actualidad ha manifestado su desacuerdo porque la actual propuesta de integración es «una bancarización de las cajas». Por esta causa, CCOO ha establecido «una serie de condiciones», entre las que consideraría «fundamental» la forma de abordar un acuerdo laboral para «evaluar cómo responder a este proceso de fusión».
Pese a admitir que las cajas vascas «tienen que redimensionarse», añadió que «no lo tenemos claro. Ahora mismo lo vemos complicado, porque no ha habido ningún avance en materia laboral, que es algo absolutamente clave», insistió. GARA