El Consejo de Seguridad de la ONU acordó ayer por unanimidad desplegar una nueva remesa de 4.200 «cascos azules» en la disputada región sudanesa de Abyei, en concordancia a un acuerdo firmado la semana pasada por el sur y el norte de Sudán, quienes se disputan la soberanía de esa zona. Tanto el Gobierno sudanés de Jartum como el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán -autoridad del sur- acordaron la participación de más efectivos de la organización internacional el pasado lunes, en vista del enconamiento de los enfrentamientos. En principio, la misión especial de la ONU se mantendrá por seis meses en la zona.

En las últimas semanas se han protagonizado graves altercados entre las dos partes, los cuales han provocado el desplazamiento de miles de personas hacia las regiones del sur. En los últimos días han llegado a la ciudad sureña de Turalei más de 40.000 personas.

Sudán del sur ha acusado a Jartum de intentar apoderarse mediante estos ataques de las regiones ricas en petróleo, en vista de que el próximo 9 de julio está prevista la proclamación oficial de independencia del sur.