El presidente de la Asociación Nacional de Afectados por las Adopciones Irregulares (Anadir), Antonio Barroso, equiparó ayer al Estado español con un «supermercado de bebés para todo el mundo», después de encontrar evidencias de niños nacidos en el país que fueron adoptados irregularmente y que acabaron en el extranjero. Concretamente, Barroso aseguró que han documentado casos de bebés adoptados por familias de Texas (EEUU), Perú, Gran Bretaña o Alemania; es más, también reiteran que «el tema de las adopciones era bien conocido en esos países».

Anadir calculaba hasta ahora que unos 300.000 niños fueron adoptados en el país irregularmente, pero con estas evidencias reiteran que pueden ser «muchísimos más».