GARA > Idatzia > Mundua

El Tribual Penal Internacional emite una orden de detención contra Gadafi

Cuando se cumplen cien días de la intervención internacional contra Libia, el Tribunal Penal Internacional de La Haya se sumó ayer a la persecución contra el líder libio Muamar Gadafi al ordenar su detención. Le acusa de «crímenes contra la humanidad» en la persecución de la población contraria al régimen. También ordenó el arresto de su hijo Seif al Islam y del jefe de los servicios de información libios, Abdallah al Senussi, acusados de organizar la represión.

p022_f01_199x128.jpg

GARA

El Tribunal Penal Internacional (TPI) emitió ayer una orden de arresto por crímenes contra la humanidad contra el coronel Muamar Gadafi, que se convierte así en el segundo jefe de Estado perseguido por el TPI tras el sudanés Omar al Bechir. En una vista pública en La Haya. la juez Sanji Masenono Monageng afirmó que «hay motivos razonables para creer que Muamar Gadafi, en coordinación con su círculo cercano, concibió y orquestó un plan destinado a reprimir y a perseguir a la población que estaba en contra del régimen».

Los jueces lanzaron también órdenes de detención contra el hijo de Gadafi, Seif aL-Islam, y el jefe de los servicios de información libios, Abdallah al-Senussi, como lo había pedido el fiscal Luis Moreno-Ocampo en un recurso presentado el 16 de mayo.

El fiscal acusa a Muamar Gadafi, su hijo Seif al Islam y su cuñado Abdallah al-Senussi, de asesinato y persecuciones que constituyen crímenes contra la humanidad cometidos por las fuerzas de seguridad sobre la población libia desde el 15 de febrero, sobre todo en Trípoli, Bengasi y Misrata.

La revuelta en Libia ha causado miles de muertos, según el fiscal del TPI, y ha provocado la huida al extranjero de unos 65.000 libios y el desplazamiento de otros 243.000 en el interior del país, según la ONU.

Ante la orden de detención, el Gobierno de Gadafi rechazó la jurisdicción del TPI, ya que no ha firmado a el Estatuto de Roma que lo fundó, y acusó al Tribunal de «actuar como una cobertura para la OTAN».

El portavoz del presidente sudafricano, Jacob Zuma, Zizi Kodwa, declaró que Zuma «está extremadamente disgustado y preocupado por la orden de arresto lanzada por el TPI contra Gadafi». «Es realmente triste que el TPI pueda tomar tal decisión mientras la Unión Africana ha hecho tanto. Creo que el progreso realizado pone de manifiesto que hay un compromiso por parte de la autoridad libia que dirige Gadafi y por parte del CNT, y esto va a minar el trabajo» de estas negociaciones, lamentó. Zuma preside la Unión Africana, que salió el domingo en apoyo de Gadafi y subió el tono de acusaciones hacia la OTAN, recordando que la ONU no le había encomendado llevar a cabo «el asesinato político» del líder libio. .

Por su parte, el jefe de la diplomacia francesa, Alain Juppé, reconoció contactos entre representantes del régimen libio y rebeldes, centrados en el futuro del coronel Gadafi. Para Juppé, la decisión del tribunal demuestra que «la cuestión no es saber si debe dejar el poder, sino cómo y cuándo».

El fiscal del TPI abrió su investigación el 3 de marzo, sólo dos semanas después del comienzo de la revuelta libia, y en su informe concluyó que «las pruebas demuestran que Gadafi ha concebido un plan para reprimir las manifestaciones populares de febrero por todos los medios, incluida la utilización de la violencia extrema y el asesinato». Seif al-Islam, de 39 años, «primer ministro de facto» y Abdallah Al-Sanussi, de 62 años, «brazo derecho» de Gadafi, «han jugado un rol clave en la puesta en marcha de este plan», añadió.

Considera que los tres hombres son «penalmente responsables de los asesinatos, detenciones, desapariciones y maltrato contra manifestantes no armados y disidentes cometidos presuntamente por las fuerzas de seguridad libias desde el 15 de febrero».

En funcionamiento desde 2002, el TPI no dispone de fuerza de policía propia y depende de la voluntad de los Estados para la ejecución de las órdenes de detención.

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, aseguró que la orden de arresto emitida por la Corte contra Gadafi «refuerza la razón» de la misión aliada en Libia. El Consejo Nacional de Transición (CNT) libio, el órgano de los rebeldes, aplaudió la orden de arresto y sostiene que «acelerará la partida de Gadafi y su régimen».

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Catherine Ashton, instó a la «plena cooperación» con el tribunal internacional para hacer cumplir la orden.

Cien días de combates

El anuncio de las órdenes de detención se produce en el momento en que la campaña de bombardeos de los países miembros de la OTAN para ayudar a los rebeldes libios cumple cien días sin haber salido del atasco en el que se encuentra el conflicto. Ni ha logrado la caída de Gadafi, ahora ya objetivo declarado, ni las tropas del Gobierno han acabado con el avance rebelde.

Sobre el terreno, los rebeldes se encuentran a unos cincuenta kilómetros de Trípoli. El secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Políticos, Lynn Pascoe, afirmó que los rebeldes tienen ahora cierta ventaja.

Hasta ahora, los principales dirigentes de Naciones Unidas habían guardado silencio en torno a una posible derrota de las fuerzas leales a Gadafi, pese a que desde hace tres meses son objeto de bombardeos por parte de las fuerzas de la OTAN. «Aunque no tenemos datos detallados de la situación militar sobre el terreno, está claro que la iniciativa, aunque de forma interrumpida, está del lado de las fuerzas de la oposición apoyadas en algunos momentos por aeronaves de la OTAN», declaró Pascoe en el Consejo de Seguridad de la ONU. Desde el 19 de marzo, fecha del comienzo de la ofensiva por parte Washington, París y Londres y de las primeras misiones de los aviones de combate franceses en el Este, la OTAN, que asumió el mando de las operaciones el 31de marzo, continúa atacando objetivos y bombardea de forma diaria unos cincuenta lugares y está a punto de alcanzar su salida número 5.000.

Los objetivos, que en un principio se dirigieron a garantizar el avance rebelde hacia el oeste, ahora se centran en Trípoli y los alrededores de la capital, en manos de Gadafi, pero también en torno a Misrata (unos 200 kilómetros al este) y Brega (800 kilómetros al este), así como las montañas de Nafussa, al sur.

Escenario estancado

Y en lo que ha pasado a ser una guerra con múltiples frentes, cada uno de los dos campos no puede atribuirse más que algunas victorias. La OTAN consiguió en un principio alejar a las tropas gadafistas del bastión rebelde de Bengasi y más tarde las expulsó de los alrededores de Misrata, pero no ha sido capaz de inclinar de forma definitiva la balanza y la situación se encuentra en una especie de impase, donde los insurgentes mantienen sus posiciones en torno a Misrata y Ajdabiya, cerca de Brega, aunque los disparos esporádicos de obuses continúan causando víctimas.

El domingo los rebeldes señalaban que la situación estaba en calma, y sólo se detectaron enfrentamientos en las montañas de Nafussa.

Pese a los éxitos limitados obtenidos por la OTAN , la mayor parte de los libios del Este siguen apoyando la acción de la Alianza Atlántica, recordando que hace tres meses, Gadafi asediaba Misrata y amenazaba Bengasi. Es el mensaje que la OTAN se encarga de repetir ante las dudas de sus socios que, como Italia, piden ya el fin de una operación demasiado costosa.

Pulso en la comisión de reformas de Túnez

El líder del movimiento islamista tunecino Ennahda, Rached Ghannuchi, ha echado un pulso a la comisión encargada de las reformas políticas anunciando que su formación se retiraba de esa instancia a la que acusó de actuar como un parlamento no elegido. «¿Quiénes son para querer fijar leyes esenciales para el pueblo? », criticó el líder islamista. La comisión fue creada en febrero para diseñar las futuras instituciones de Túnez tras la revolución que expulsó del poder al ex presidente Zine EL Abidine Ben Ali. Ghannuchi no excluyó una posible vuelta, a condición de que se tenga más en cuenta sus solicitudes. «Será una retirada definitiva si la comisión continúa ignorando el principio de consenso», afirmó. No es la primera vez que Ennahda suspende su participación. Lo hizo en mayo, tras la polémica sobre el retraso en las elecciones y la semana pasada por una serie de quejas. También el Partido Demócrata Progresista (PDP) estima poco representativo este organismo y cree que «cuanto antes desaparezca mejor». Ennahda y el PDP son las dos formaciones que esperan contar con mayor número de votos en las elecciones de octubre. GARA

ministros negocian

Dos ministros libios de Sanidad y Asuntos Sociales llegaron ayer al sur de Túnez para unirse al ministro de Asuntos Exteriores, Abdelati al-Obeidi, que lleva las negociaciones sobre el futuro de Libia con varias delegaciones extranjeras.

ex ministro en doha

El ex ministro libio de Asuntos Exteriores Musa Kusa lleva varias semanas viviendo en una lujosa suite del hotel Four Seasons de Doha, capital de Qatar, con protección especial según «The Daily Telegraph». Kusa huyó a Gran Bretaña a finales de marzo y fue interrogado por los servicios de inteligencia británicos.

kurdos

Casi 300 kurdos procedentes del Estado sirio se manifestaron ayer en Erbil, capital de la región autónoma de Kurdistán en Irak, ante una sede de la ONU con pancartas contra la negociación con el régimen de Al Assad y demandando una Siria «democrática y parlamentaria que reconozca el derecho de los kurdos».

Un centenar de opositores sirios apoya desde Damasco «el levantamiento popular pacífico»

Un centenar de opositores sirios, varios de los cuales ya han pasado por la cárcel por sus opiniones, desafiaron ayer al régimen de Bachar al-Assad convocando una reunión pública en un hotel de Damasco, que las autoridades no impidieron. Sin afiliación a un partido político, se trata de un grupo intelectuales, algunos de los cuales han pasado ya por la cárcel por sus opiniones. En un decálogo, subrayaron su apoyo al «levantamiento popular pacífico en favor de una transición a un Estado democrático, civil y multipartito que garantice» los derechos y libertades de todos los sirios. Asimismo, rechazan la «opción de las seguridad» y piden retirar las fuerzas de seguridad de las ciudades y pueblos a la vez que investigar las muertes de manifestantes, en referencia a la represión de las protestas que se desarrollan desde mediados de marzo y en las que han muerto 1.342 civiles y 343 policías y soldados, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. También piden garantías para manifestarse sin autorización y liberar a los detenidos durante las protestas. Además, reclaman que la prensa permita expresarse a todas las opciones, que se autorice a la prensa internacional trabajar en el país y condena las incitaciones al confesionalismo. En otros puntos, exigen la vuelta de los refugiados asegurando su seguridad y pide reuniones similares en cada departamento. «Hay dos caminos, el primero claro y no negociable que va a una transición pacífica hacia un régimen democrático y que salvará a nuestro pueblo y a nuestro país. Hay otro camino que conduce hacia los desconocido y destruirá todo», afirmó el escritor Munzer Khaddam, que presidió la reunión.

A su vez, el régimen convocó a las fuerzas, intelectuales y a personalidades políticas a que participen en una reunión el próximo 10 de julio para discutir las reforma constitucional, entre ellas, el multipartidismo y las elecciones. Pero la red opositora Flash se mostró crítica con los participantes en la reunión de Damasco porque piden «la reforma bajo el marco del régimen, no su caída. Lo que significa que los participantes no representan a la calle siria que se manifiesta, es detenida y muere por pedir la caída del régimen». GARA

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo