El ganador de la jornada, Mark Cavendish, logró su decimoséptima victoria de etapa en el Tour, exactamente la mitad del récord que ostenta el mítico corredor Eddy Merckx. Al ser preguntado por si se ve capaz de alcanzar al ex ciclista, el de Isla de Man dejó claro que «ése no es el objetivo. Quiero seguir ganando, en la medida de lo posible, pero no importa el número. No soy Eddy Merckx. Gano simplemente las veces que puedo. Esta carrera es tan importante, que para mí siempre será un objetivo lograr etapas en el Tour».

Aunque aún no haya conseguido ninguna victoria en este Tour, Thor Hushovd tiene otro logro: mantener el maillot amarillo. «Ha sido una semana diferente a las que yo había vivido habitualmente en el Tour. Llevar el maillot amarillo durante días es un orgullo, además con una victoria en la contrarreloj por equipos. La semana ha sido perfecta, pero me falta un triunfo de etapa», recalcaba el noruego.

No obstante, el de Garmin y líder de la ronda francesa da por hecho que hoy mismo podría perder el maillot de líder: «En la etapa de mañana [por hoy] no vamos a defender el maillot amarillo. Sé que no voy a poder seguir a los mejores en Super Besse. La etapa la van a controlar los equipos de los favoritos para la general».

No es novedad hablar de Euskaltel en las escapadas. Ayer fue Pablo Urtasun quien arriesgó: «Ha sido una jornada complicada y la hemos superado con buena nota. Estoy contento por haber entrado en la fuga y haber dado presencia al equipo. Nos hemos arreglado bien, pero quizá nos hemos puesto a tirar a tope muy lejos de la meta y hemos gastado las fuerzas antes de lo necesario. Hacía mucho viento en contra y era difícil, pero he tenido buenas sensaciones y había que intentarlo. No hemos traído a ningún sprinter puro, así que tenemos que jugar nuestras bazas desde lejos».

Su compañero y líder del equipo naranja, Samuel Sánchez, se refirió a lo peligrosa que está siendo la carretera. «Estamos viviendo una tensión muy grande en el pelotón y lo importante es pasar estas etapas sin sufrir ningún percance. Los compañeros están haciendo un gran trabajo y me han llevado muy bien colocado en todo momento. En los momentos más difíciles he ido muy bien situado gracias a ese trabajo de todos», indicaba el asturiano.

Del cielo al infierno

Peor le fueron las cosas a Tom Boonen (Quick Step) y a Bradley Wiggins (Sky), que tuvieron que abandonar la carrera por problemas físicos debido a sendas caídas, el primero de ellos el miércoles y el segundo ayer mismo, a falta de 40 kilómetros.

«Me dolía demasiado la cabeza, tenía demasiados problemas y no lograba concentrarme. Lo he intentado, pero cada kilómetro que corría era un kilómetro de más. He bajado dos veces al coche del equipo y me han dicho que no merecía la pena forzar. En la primera semana siempre hay muchas caídas y yo no he tenido suerte», relató Tom Boonen tras la carrera.

Respecto a lo sucedido a Wiggins, el mánager del Sky, Dave Brailsford, explicó que el corredor «tiene una rotura limpia de clavícula. Se podía ver el dolor que tenía y cuando se levantó se tenía que sostener el brazo y no pudo volver a su bicicleta».

Lamentó la pérdida de Wiggins, «porque estaba en la forma de su vida, había trabajado muy duro y estábamos muy, muy seguros de que este año iba a estar a la altura de llamar a la puerta del podio. Controlamos todos los datos de los entrenamientos y no hay ninguna duda: podía subir con los mejores escaladores y rodar contra el reloj como los especialistas. Estaba seguro de que cuando llegara la montaña encontraría su sitio en la clasificación general. Pero ya no lo sabrá».

Su director deportivo, Sean Yates, declaraba haber visto «al menos a tres de sus corredores en el suelo al llegar al lugar de la caída: Uran, Wiggins y Knees. Era un pequeño caos».

Su compañero vasco, Xabier Zandio, también habló sobre lo sucedido: «No hemos tenido un buen día por la caída de Wiggins. Le hemos estado esperando pero no ha podido subirse a la bici. Es una baja muy importante para nosotros. Tenía todo el equipo a su disposición. Estaba en buena forma, teníamos confianza. Hasta ahora nos había salido todo muy bien. Pero ahora tenemos que cambiar de estrategia. Queda mucho Tour y hay que tratar de hacer cosas».