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IRUÑEKO SANFERMINAK

El Pobre de Mí cierra unas fiestas empañadas por denuncias de violación

Las tres agresiones sexuales de las que se tiene constancia son el punto negro de las fiestas. A pesar de ello, el Ayuntamiento sigue sin ofrecer datos oficiales. Los sanfermines 2011 no se han salido del guión: fiesta en la calle, programa popular multitudinario y reivindicaciones que no pudieron ser ocultadas. Para olvidar, como siempre, los intentos de censura, las prohibiciones y los incidentes provocados por la Policía Municipal.

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Alberto PRADILLA | IRUÑEA

Con el tradicional Pobre de Mí, los sanfermines 2011 se cerraron definitivamente. Unas fiestas marcadas por las denuncias de violación y el mutismo del Ayuntamiento de Iruñea, que se ha negado a confirmar el número de agresiones sexuales registradas durante los últimos nueve días. Al margen de esto, los sanfermines se han mantenido dentro del guión esperado: calles a rebosar y actos populares multitudinarios a pesar del veto del Ayuntamiento. Como resumía la Federación de Peñas, «los colectivos populares han sabido estar por encima de problemas, trabas institucionales y mercantilización de espacios para sacar adelante unas fiestas donde el gran ambiente de la calle y la participación ciudadana han sido fundamentales».

Nadie puede ocultar que las violaciones han sido el gran borrón de las fiestas. Ya lo advertía Zurine Altable, de Gora Iruñea!, días antes del 6 de julio. «El Ayuntamiento ha silenciado muchos casos de agresiones sexuales de diversa intensidad», denunció. Este año, al menos tres mujeres de 16, 22 y 40 años han sido agredidas. Aunque apenas existen datos. El hecho de que las denuncias se hiciesen públicas terminó provocando la reacción del alcalde, Enrique Maya (UPN), que tampoco quiso confirmarlas aunque reconoció la gravedad de la situación. Una idea compartida por los portavoces del resto de grupos municipales y por la Federación de Peñas. Habrá que esperar a hoy, cuando está realizará la valoración oficial de fiestas, para saber si se ofrece algún detalle más.

Los sanfermines han transcurrido con la normalidad del caos que se le espera. Como siempre, se escucharán las voces que dicen que «esto no es lo de antes», aunque las calles han estado abarrotadas.

Los actos populares organizados por Gora Iruñea! han disfrutado de gran aceptación, y eso que el Ayuntamiento trató de prohibirlos a dos días del txupinazo. Con el objetivo de promover la participación ciudadana, las peñas instaron ayer al Ayuntamiento a «reactivar una verdaera» Mesa de los Sanfermines de cara a preparar la próxima edición.

Los vetos del Consistorio han venido acompañados de incidentes protagonizados por la Policía Municipal. El 6 trataron de impedir (sin éxito) la entrada de la ikurriña y el 7 irrumpieron a golpes en un bar de Alde Zaharra. Sin embargo, las ganas de fiesta de los iruindarras han sobrepasado los intentos censores de el Ayuntamiento. Ahora, con el reloj puesto nuevamente a cero, solo queda decir que ¡ya falta menos!

PARTICIPACIÓN

La Federación de Peñas destacó la participación ciudadana e instó al Ayuntamiento a reactivar «una verdadera Mesa de los Sanfermines» de cara a preparar con los colectivos populares las fiestas del próximo año

«El silencio» que no queremos escuchar nunca más

Las 16 peñas de Iruñea y cientos de personas se dieron cita ayer, junto a la plaza de toros, minutos antes de la corrida, para concentrarse en repulsa por las agresiones sexistas. La iniciativa contaba, además, con el respaldo de la plataforma Andrea, Lunes Lilas y la madre de Nagore Laffage, Asun Casasola. Los colectivos populares han tenido constancia de, al menos, tres violaciones durante estos sanfermines: una menor de 16 años y dos mujeres de 22 y 40 años.

Las pancartas realizaron su recorrido de la manera habitual, a ritmo de txaranga, hasta que llegaron a la plaza de toros. Entonces, sus instrumentos se callaron y las pancartas volvieron a enrollarse, hasta que, finalmente, se dejaron todas apoyadas contra la pared. Algunas de ellas llevaban sábanas a modo de crespones violetas. Poco después, los músicos de La Jarana empezaron a entonar una melodía triste, colocándose el gentío formando un corro a su alrededor. La pieza se llama «El silencio».

Cuando terminó de sonar la última nota de la partitura, la gente prorrumpió a gritos, para denunciar esta lacra que ha golpeado con dureza los sanfermines de 2011. «No es no», clamaron a voces. Muchos de los presentes lucían también un lazo lila sobre sus camisetas blancas.

En el comunicado que remitieron a prensa Andrea y Lunes Lilas, hicieron hincapié en la importancia que tienen las denuncias, porque «lo que no se denuncia no existe y, por tanto, no se intenta poner soluciones». A tal efecto, recordaron que ellos, al igual que Gora Iruña durante las fiestas, disponen de un teléfono de ayuda y asesoramiento para quienes hayan sido víctimas de una agresión sexual o de maltrato. El número al que se puede llamar es el 686 677 677 o el 659 566 272.

Esta plataforma, recuerda además, el caso de Nagore Laffage, que murió a manos de un joven de Iruñea en los sanfermines de 2008. «Las mujeres tienen el mismo derecho a compartir la calle, la fiesta y el resto de espacios, sin que su seguridad y sus derechos sean violados. Lo sucedido a Nagore, nunca más a ninguna mujer».

Por su parte, la Federación de Peñas explicó que «tristemente, comprobamos que las campañas de sensibilización e información realizadas por numerosos colectivos sociales, entre los que nos encontramos, no han sido suficientes». En este sentido, la Federación y la plataforma Gora Iruñea! insisten en que «de ninguna forma» van a asimilar una violación como «daño colateral» de la fiesta. A.I.

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