El ciclismo noruego, que sólo tiene a dos representantes en el Tour, logró ayer su cuarta victoria de etapa al igualar Edvald Boasson Hagen en la meta de Pinerolo las dos conseguidas por Thör Hushvod. El gran talento del Sky, con 24 años recién cumplidos, logró ayer su 54ª victoria en profesionales tras ser el más fuerte de una fuga de catorce corredores en la que Rubén Pérez intentó buscar el triunfo desde lejos y sólo encontró el premio de la combatividad.

Por detrás Alberto Contador, como el martes en el col de Manse, volvió a atacar en el último puerto de Pramartino de Segunda, pero no pudo marcharse en la subida y lo intentó en la bajada en compañía de Samuel Sánchez. Fueron atrapados en la misma línea de meta por un grupo en el que figuraban los primeros de la general menos Voeckler, que se salió de la carretera cuando marchaba por detrás de Samuel y Contador, y de Basso, que reconocía tras la etapa que no había llegado con buenas piernas a su país.

Perdieron 27 segundos que acercan a Evans a 1:18 del líder del Europcar antes de las dos etapas alpinas que van a marcar el desenlace de la carrera. Junto a Voeckler y Basso llegó Haimar Zubeldia, que habría recuperado la decimoquinta plaza de la general de no mediar la presencia de Casar en la escapada del día.

Rubén Pérez y Amador

Tardó sesenta kilómetros en formarse y Euskaltel volvió a estar representado por Rubén Pérez, que acumula cinco escapadas buenas y tres de ellas en etapas donde hay que tener más fuerza que suerte para entrar. Junto a él destacó la presencia del bravo costarricense afincado en Iruñea, Andrey Amador, que con un esquince de tobillo desde el primer día no se conforma con acabar la carrera y fue capaz de dar presencia al Movistar en la primera etapa alpina.

Con ellos entraron en la fuga Mollema y Tjallingii (Rabobank), Leukemans y Bozic (Vacansoleil), Fofonov (Astana), Muravyev (Radio Shack), Paterski (Liquigas), Chavanel (Quick), Boasson Hagen (Sky), Casar (FDJ), El Fares (Cofidis) e Hivert (Saur). Luego contraatacaron por detrás Roche (Ag2r) -muy activo toda la etapa para intentar meterse en la lucha por la general con una fuga-, lo mismo que De Weert (Quick). Con ellos se fue Hoogerland (Vacansoleil), pero sin opciones de coger a los de adelante ni de sacar tiempo para la general.

En la parte final del alto de Sestrieres, atacó Rubén Pérez y llegó a tener más de un minuto con respecto a los otros trece de la fuga. Esperaba la llegada de algunos, pero nadie le fue a buscar y marchar solo le dejó sin opciones y fue atrapado en el último puerto de Pramartino.

Allí demostró Boasson Hagen su gran potencia para marcharse hacia la victoria y en ese mismo puerto lo intentó Contador. Andy Schleck respondió con facilidad al agradecer que las condiciones climatológicas nada tuvieron que ver con las de la víspera y sólo en el descenso pudo marcharse el madrileño con Samuel Sánchez. Fueron a tope, pero por detrás se entendieron los favoritos y consiguieron atraparles en los últimos metros. Su ataque sólo provocó que Voeckler perdiera 27 segundos que complican su defensa del liderato en el Galibier.