EH Jaietan | Baiona
¡Vivan las fiestas derechosas!
Philippe Langlade
Deseamos precisar que, por medio de este cartel, la idea no era alimentar una discusión de cuadrilla rugbística entre el Aviron Bayonnais y el Biarritz Olympique (además, nos importa un bledo porque nosotros jugamos al polo o al golf) sino felicitar el haber abandonado el buzo de trabajo azul para sustituirlo por el blanco y el rojo como colores oficiales de las fiestas.
«Es evidente que se trata de un intento de nuestro bien amado alcalde de limpiar Nuestras fiestas y de separar de ellas a obreros y proletarios.
El incremento de fuerzas de seguridad públicas y privadas y la instalación de cámaras cada vez más numerosas son la garantía para el éxito de la fiesta.
Las elecciones musicales también están pensadas para nuestro bienestar. Qué alegría poder escuchar por todas partes a Claude François, la Peña Baiona y a nuestro preferido, Michel Sardou, un artista que transmite los verdaderos valores.
En ese sentido, nosotros también proponemos ideas para impulsar aún más la derechización y aburguesamiento de esta fiesta de Baiona que todavía es demasiado popular:
- Cobrar la entrada para así poder controlar la identidad de quienes vienen a la fiesta y descartar a los indeseables.
-Aumentar drásticamente el precio de las consumiciones para reducir el número de pobres en nuestras fiestas (que, de encima, no saben divertirse) y ayudar a nuestros valerosos comerciantes bayoneses.
- Proponer invitados que sean garantes de los valores reales de la fiesta: Charles Pasqua, José Mª Aznar, Monseñor Marc Aillet, obispo de Baiona, JR Ewing.
El Comité para la derechización de las fiestas de Baiona les desea felices fiestas.
Nota: Este peculiar Comité ha pegado carteles satíricos en las calles baionarras en las que se puede leer, junto a la foto del alcalde Jean Grenet, vestido de blanco y rojo, frases como «elecciones municipales 2014, votemos Borotra» o «ni 2012, ni 2014, no votemos nunca jamás.
Por otro lado, hay que precisar que hace algunos años los baionarras hacían la fiesta vestidos con buzos de trabajo, antes de cambiar al rojo y blanco.