FÚTBOL Supercopa española
La historia continúa...
Primer título del curso (22.00) entre un Barça sin acoplar y un Madrid que examina la versión 2.0 de Mou.
Joseba VIVANCO
Decía ayer Pep Guardiola que «cuando hay un título en juego, no hay excusas», pero lo cierto es que mientras su rival de esta noche en el Bernabéu (22.00 TVE-1) necesita sumar cada entorchado en juego como quien necesita comer, este Barça del `tiqui-taca' es como esas grandes estrellas de Hollywood, que pueden elegir el papel que quieren, y en el caso de los Messi, Piqué, Xabi, Iniesta y compañía, hoy por hoy, pueden permitirse el lujo de elegir el título que esta temporada quieren llevarse a sus vitrinas e ir a por él.
Y es que la balanza de logros en los últimos años despeja toda duda sobre quién es el mejor: Pep 10-Mou 1. O lo que es lo mismo, los barcelonistas han ganado 10 títulos de 13 entorchados posibles, y los madridistas, tras gastarse 400 millones de euros, sólo pueden poner sobre la mesa la pasada Copa del Rey.
Con estos antecedentes, parece evidente quién se enfrenta a mayores urgencias en esta Supercopa, una muesca en el historial futbolístico de ambos contendientes que en su día la entidad de Chamartín desdeñaba. Pero hoy, un título es un título, y si es ante el eterno y superior rival, más valor aún. Los blancos y azulgrana se han medido en cuatro ocasiones en este torneo, y todas con un mismo final: triunfo madridista.
Pero Guardiola y su Barça no se juegan aquí honra ni prestigio alguno, máxime después de que hasta el endiosado delantero brasileño Neymar dijera hace unos días que el Barcelona es el mejor equipo del mundo. Pero la bautizada versión 2.0 de Mourinho con sus nuevas incorporaciones -Coentrao, Sahin, Altintop o Callejón- se enfrenta aquí a esa leyenda que dice que los proyectos del controvertido técnico luso son mucho mejores en su segundo año, como ya le sucedió en Oporto, Chelsea e Inter.
Posibles «onces» de lujo
Pero, como dijo el cerebro alemán del ``Milagro de Berna'', Sepp Herberger -cuando Alemania ganó el Mundial del año 1954 tras haber perdido la guerra-, «un partido dura 90 minutos», y hoy no hay lugar para el pasado. Las espadas están en alto y, si hay un favorito, ése parece ser el Real Madrid de un lanzado Cristiano Ronaldo y un enrachado Karim Benzema.
Ayer, a Pep Guardiola le preguntaban más por la confirmación de la llegada de Cesc Fábregas que por el duelo ante los merengues. Lo cierto es que la pretemporada de los catalanes ha sido de todo menos la ideal para afrontar esta final a doble partido. Además de algunos resultados nada optimistas en su pretemporada, apenas sí han tenido unos días para que la plantilla o al menos los disponibles -Puyol y Afellay siguen lesionados-, hayan trabajado juntos.
Jugadores claves en el esquema de Pep, como Lionel Messi, Dani Alves y Javier Mascherano, u otros que lo deben ser como el punta chileno Alexis Sánchez, apenas acumulan tres o cuatro sesiones de entrenamiento. Así las cosas, podrían saltar al campo de inicio los Valdés; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Abidal; Busquets, Xavi o Thiago, Iniesta; Messi, Pedro y Villa.
El Madrid, en cambio, ha sido una apisonadora estas semanas, eso sí, haciendo caja más que probando su potencial real, jugando ante equipos estadounidenses y asiáticos casi en exclusiva. José Mourinho parece tener sólo una duda, la del extremo derecho, y debe elegir entre el fideo Di María o su paisano Fabio Coentrao. El resto, todo apunta a un once de lujo formado por Casillas; Sergio Ramos -que ayer entrenó-, Pepe, Carvalho, Marcelo; Xabi Alonso, Khedira, Di María o Coentrao; Özil, Ronaldo y Benzema.
«Todavía es jugador del Arsenal», respondió ayer Pep Guardiola, al referirse al fichaje de Cesc Fábregas. Y aconsejó a la prensa: «Las redes sociales son imparables, pero yo no voy a los `tuits' de Piqué y Puyol para saber cómo está la situación».
Será la quinta vez que los dos grandes conjuntos se verán las caras en la pelea por este título. Y de momento, el resultado final cuando se han enfrentado el Real Madrid y el Barça ha sido el mismo: triunfo y trofeo para el equipo merengue.