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EH Jaietan | Bilboko Aste Nagusia

El récord en la tortilla de patata augura un exitoso gastronómico

El arranque del certamen gastronómico de Aste Nagusia comenzó con un récord en la tortilla de patata, que superó los 300 platos. Ederrena, de Mungia, se impuso en el que además era el campeonato de Euskal Herria, empleando un huevo de caserío y una patata de selección contra los que no hubo rival, seguido de los también mungiarras Erraldoi y Ainhoa.

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Agustín GOIKOETXEA | BILBO

El prestigioso certamen gastronómico que organiza Bilboko Konpartsak bajo la dirección del guisandero Kepa Freire empezó ayer superando cifras de participación. Fueron 311 platos los que se inscribieron al concurso de tortilla de patata, cuyo ganador fue también designado campeón de Euskal Herria.

En un Arenal a rebosar desde primera hora de la mañana, decenas de cuadrillas y comparseros se instalaron para comenzar a preparar sus tortillas a concurso. Al margen de la infraestructura imprescindible, como es un hornillo de gas, los hubo que hasta contaron con un futbolín con el que entretenerse mientras otros del grupo pelaban patatas, cortaban cebolla y pimiento, batían huevos o se empleaban en que los ingredientes estuvieran en su punto en un aceite de calidad. Lo tradicional se mantuvo: botella de vino o txakolí y txorizo y queso para picar.

Para mediodía, el aroma en el corazón de la fiesta animaba las papilas gustativas, especialmente a los cientos de personas que se acercaron a disfrutar del ambiente que se respira en el Gastronómico que anima otro incombustible festero, José Anto- nio Bastegieta, Marko. El de Kortezubi, entre cortes informativos sobre el certamen y comentarios txirenes, alertaba a los presentes sobre la necesidad de extremar las precauciones frente a los hurtos que se suelen producir en las aglomeraciones festivas y es que la Policía Municipal de Bilbo ha advertido de la presencia de carteristas en Aste Nagusia.

Poco antes de la hora de la presentación de las tortillas, Freire explicaba a GARA que los ingredientes básicos eran patata, cebolla, ajo, pimiento verde y rojo, huevos, sal y aceite. El director del certamen apuntaba a que quienes utilizan cebolla tienen que ser conscientes de que no pueden abusar de ella, «porque sino la tortilla sabe mucho a cebolla. La cebolla hay que saber manejarla».

Freire, al igual que representantes de las comparsas, no ocultaban su satisfacción por el número de inscritos y el buen ambiente que se respiraba en El Arenal. «Cada año viene más gente. Sólo hay que ver que en algunas revistas especializadas, por ejemplo en las que hay en los aviones se incluyen reportajes -subrayó el guisandero- en los que se destaca a Marijaia y el concurso gastronómico como señas de identidad de las fiestas de Bilbao».

En torno a las 13.30, el jurado, compuesto por cocineros y miembros de txokos, tuvo la difícil tarea de catar todos los platos para designar a la mejor tortilla. La mesa en la que se de- jaron era de grandes dimensiones. Entre los favoritos, varias cuadrillas de Mungia, de donde es Kepa Freire, por lo que el director no conformó el comité para evitar suspicacias. Los tres primeros puestos en la categoría general fueron para Ederrena, Erraldoi y Ainhoa, todos ellos de Mungia.

Más tarde, Freire explicaba que la razón de que estas cuadrillas lleven cuatro años imponiéndose en el concurso es que emplean un huevo de caserío natural muy cuidado, además de una patata de selección inmejorable. «Los ingredientes y el mimo son imprescindibles para situarse en los primeros puestos de la clasificación», argumentó Freire.

Hoy no habrá gastronómico, por el plante de las comparsas, aunque el jueves continuará con el bacalao a la vizcaina, al que seguirá el viernes el bacalao al pil-pil; el sábado el marmitako, donde se disputará también el campeonato de Euskal Herria; y el domingo, el guisado de rabo y se dará el premio general absoluto del certamen.

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