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Crónica | Denuncia de LAB, CCOO y UGT

A comer el bocadillo a las puertas de El Corte Inglés

El malestar entre los trabajadores de El Corte Inglés por «la subida salvaje de los precios del comedor de empresa» llevó ayer a los mismos a protestar con una comida popular a las puertas del centro de Bilbo. Una imagen inusual que acaparó la atención en plenas fiestas.

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Juanjo BASTERRA

El comité de empresa de El Corte Inglés de Bilbo, formado por LAB, CCOO y UGT, realizó una protesta en la que participaron trabajadores del centro comercial en contra de la «subida salvaje» de los precios en el comedor de la empresa.

«Es grave lo que han hecho porque nos han encarecido entre 100 y 200 euros la comida al mes, pero tenemos un salario de 869 euros». Así se expresó Marian Martínez, responsable de LAB en el comité de empresa.

El centro comercial ha impuesto al conjunto de sus centros comerciales del Estado español esa decisión que afecta de lleno a los bolsillos de los empleados «para ahorrarse unos euros a nuestra cuenta, pero es inaceptable», explicó una trabajadora que participó en Bilbo.

Ante las puertas principales de acceso en la Gran Vía, trabajadoras de El Corte Inglés instalaron una mesa entre la 13.00 y las 15.00 donde comieron bocadillos, sandwiches y otras viandas en señal de protesta por la decisión de la dirección.

Marian Martínez denunció que «comíamos en el self-service y nos han impuesto desde Madrid una subida de precios que va del 50% al 300% dependiendo los platos o productos que elijas».

El problema es, como denunciaron ante la enorme circulación de personas que pasea por las calles durante la Aste Nagusia, que «nuestro salario ha aumentado este año en un 2%, pero la dirección de El Corte Inglés nos ha subido de forma arbitraria los precios del comedor de empresa. Es inaceptable y muy negativo», precisó la responsable sindical.

«Decisión arbitraria»

«En general, se ha producido en todos los centros», añadió para explicar que en Bilbo han pedido a la dirección que «retome el asunto» y «nos explique esa actuación arbitraria». La respuesta que les han dado «es que es una decisión de la dirección central».

Ese hecho ha llevado a que «los trabajadores hayamos decidido esta semana no comprar en el centro como medida de protesta» y, a la vez, «salir a la calle con el bocadillo para que se sepa lo que están haciendo con nosotros porque, al contrario de lo que pueda pensarse, los salarios medios son de 869 euros y, si destinamos a comida entre 100 y 200 euros, nos queda una porquería de sueldo».

Según explicaron en la comida popular que realizaron a las puertas del centro comercial, en el supermercado de El Corte Inglés «un yogur al cliente le sale más barato que a nosotros en el comedor de empresa. Un sandwich en la máquina del comedor del personal es más caro que comprarlo en la pastelería. Con esto lo estamos diciendo todo, que tratan de aprovecharse de la plantilla, pero no estamos dispuestos a ceder».

Los representantes sindicales de LAB. CCOO y UGT aseguran que si la dirección no da marcha atrás «nos veremos en la obligación de tomar otras medidas de presión».

La plantilla de El Corte Inglés está dispuesta a llevar adelante una denuncia de mayor calado para evitar estos recortes. «Responderemos con firmeza ante cualquier otro ataque se que realice», dijeron.

 

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