La Liga de Fútbol Profesional (LFP) y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) no alcanzaron un acuerdo para la suspensión de la huelga convocada por el sindicato de futbolistas, después de mantener ayer una reunión que se prolongó por seis horas en la sede de AFE.

«Las posturas siguen alejadas. Mañana -por hoy- tendremos otra reunión para intentarlo», señaló el presidente de la LFP, José Luis Astiazaran, a la salida de la reunión. «Vamos a seguir trabajando internamente para seguir avanzando posturas», reconoció el presidente de la Liga. El próximo intento será hoy a las 16.00 en la sede de la LFP.

«Estamos intentando buscar formas imaginativas para solucionar el conflicto», explicó el máximo responsable de la LFP. «No se trata de aceptar ni de imponer», añadió. «Todavía no puedo decir que vaya a haber Liga. Lo estamos deseando, pero nos toca solucionar las diferencias», explicó Astiazaran.

En cuanto a los principales problemas en la negociación, el presidente de la Liga de Fútbol Profesional aludió a una «cuestión de interpretación» de algunos conceptos y reconoció que los impagos futbolistas son uno de los puntos clave.

«La LFP no cede»

Por su parte, el gerente y portavoz de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), Luis Gil, segundo en salir de la reunión, señaló que «la LFP no cede» con lo que las partes siguen sin llegar a un acuerdo. «La situación no ha cambiado mucho», señaló Gil con poco optimismo.

«Han sido horas de muchas propuestas y de intentar acortar distancias», admitió el portavoz del sindicato y añadió que están trabajando «intensamente» para llegar a un acuerdo. Para AFE, el principal punto de discordancia sigue siendo la garantía de los sueldos de los jugadores. «No vamos a dejar a nuestros jugadores desprotegidos».

Por otro lado, Augusto César Lendoiro, presidente del Deportivo, sugirió la intervención del Gobierno y todos los partidos políticos para buscar una solución global a los problemas.