López se afana en quitar a la izquierda abertzale la bandera de la nueva situación
Como anteayer el ministro Antonio Camacho, Patxi López dejó ver ayer un objetivo ante este curso: trasladar a la opinión pública que la nueva situación política no es obra de la izquierda abertzale, sino del Estado.
GARA | DONOSTIA
El lehendakari, Patxi López, y el PSOE en su conjunto han alineado sus discursos en este inicio de curso para incidir en un aspecto: que la nueva situación política en Euskal Herria no es producto del cambio de estrategia de la izquierda abertzale, sino de la presión del Estado.
En esta línea, Patxi López remarcó ayer en Radio Euskadi que la izquierda abertzale no debe atribuirse la ausencia de violencia de ETA porque eso «supone reconocer implícitamente que cuando la había, la decidía y la organizaba».
En paralelo, instó a los representantes de Bildu a que colaboren a quitar lo que denominó como «el respirador» a una ETA que observa «moribunda». Y añadió que no cabe que se exija ningún plazo a quienes «llevan ejerciendo la democracia toda la vida y combatiendo la violencia terrorista».
Pese a los resultados producidos el 22 de mayo, Patxi López dijo ver claro que la sociedad «entiende» que son la izquierda abertzale y Bildu quienes «tienen que recorrer ese camino». «No les debemos nada, porque mucho de lo que ha pasado en este país se ha debido a que ha habido una connivencia, un amparo y un apoyo de ese mundo a una banda terrorista», recalcó el inquilino de Ajuria Enea en los micrófonos de Radio Euskadi.
En su opinión, la izquierda abertzale y Bildu «tienen una primera responsabilidad», que es «empezar a trabajar para que ETA desaparezca definitivamente». El presidente del Ejecutivo autonómico afirmó no entender cómo «si ellos mismos y alguno de sus dirigentes» afirman que ETA «estorba», no son «capaces de hacer una cosa tan sencilla como decirle que desaparezca».
«El verano más tranquilo»
En cualquier caso, Patxi López quiso remarcar también que éste ha sido «posiblemente el verano de mayor tranquilidad de la historia reciente», en la medida en que se ha desarrollado «sin ningún tipo de violencia callejera, sin ningún tipo de amenaza hacia la libertad ciudadana, sin espacios privatizados por la propaganda o el proselitismo...»
López afirmó que con ello «se ha podido vislumbrar cómo puede ser nuestra convivencia en Euskadi cuando ETA desaparezca. Pero ETA todavía no ha desaparecido y a cada uno nos corresponde nuestra propia responsabilidad», puntualizó.
El lehendakari matizó también que cuando desaparezca ETA «todavía no se habrá cerrado el ciclo de la violencia», porque habrá que abrir entonces el de «la concordia y la convivencia» ya que estos 40 años «han dejado muchos posos de intolerancia y odios».
López destacó que el pacto de legislatura entre PSE y PP está funcionando y llegará a 2013. «Hay un gobierno absolutamente legítimo, dispuesto a agotar la legislatura y que tiene iniciativas en marcha», subrayó.
Aventuró que el PSE volverá a ser el partido más votado en la CAV en los próximos comicios del 20-N, aunque admitió que el 22-M pasado mostró una importante «desafección» de sus votantes habituales.