BERASALUZE-BEGINO 22

MTZ IRUJO-PASCUAL 13

Aunque luego en invierno no han terminado de cuajar, parece evidente que Pablo Berasaluze y Aritz Begino forman el cóctel del verano y los aficionados que ayer se dieron cita en el Santi Brouard de Lekeitio pudieron disfrutar de él. Quizá, se pudo echar de menos algo más de resistencia por parte de la pareja de Aspe, superada desde el primer pelotazo, pero la forma en la que el de Berriz y el de Auza se complementan es capaz de satisfacer al más exquisito.

Y es que, cuando Aritz Begino es capaz de mandar como lo hizo ayer ante Iñigo Pascual, difícilmente se puede encontrar a nadie que aproveche mejor esas pelotas que el zaguero rival -ayer un Iñigo Pascual que desde el comienzo tuvo problemas con sus lentillas y nunca pudo meterse en el partido- le deja entregadas cerca del frontis.

En esta tesitura, después de haber sido profeta en su tierra el sábado pasado en el primer torneo de Bilbo, Pablo Berasaluze salió ayer por la puerta grande de Lekeitio, tras realizar una nueva exhibición rematadora, con ocho tantos de aire, una dejada y dos pelotas al ancho.

Enfrente, la brega de Juan Martínez de Irujo por abrir huecos desde los cuadros alegres resultó estéril. El de Ibero mantuvo la línea sobria de los últimos partidos -sólo cometió dos errores en ataque- pero le faltó chispa para terminar con la tiranía de los de Asegarce.

Atrás, Iñigo Pascual no pudo aprovechar la oportunidad que le brindó la empresa -no jugaba un torneo desde Iruñea-. Dentro de su irregularidad, el de Abartzutza no encontró su versión buena y terminó siendo devorado por Begino.