Tres militantes de la oposición yemení resultaron heridos ayer en choques con agentes antidisturbios al final de una manifestación de decenas de miles de personas que reivindicaron la dimisión del presidente, Ali Abdulah Saleh. Alrededor de 100.000 partidarios de la oposición se congregaron en la llamada Plaza de la Protesta, cerca de la Universidad de Saná. La protesta fue convocada por los partidos de la oposición al inicio de lo que han llamado «la fase de la escalada revolucionaria» para obligar a dimitir de su cargo al presidente Saleh, que se somete desde hace semanas a un tratamiento médico en Arabia Saudí. Las ciudades de Taiz, Ibb y Damar, al sur de Saná, vivieron manifestaciones similares.