El irundarra se muestra preparado para viajar el jueves a Dinamarca tras superar un resfriado en una temporada complicada marcada por su caída y retirada del Tour.

¿Qué espera del Mundial?

Tenemos referencias de gente que ha corrido una etapa del Tour de Dinamarca que daba una vuelta al circuito, que no es complicado en cuanto a pendientes, pero sí ratonero. Es un Mundial atípico porque muchos equipos tienen interés en llegar al sprint. Desde el que ganó Cipollini no se ha vuelto a repetir que todas las selecciones piensen en un sprint masivo. Pero por lo que he visto a través de vídeos y por la información que tengo, es un final propicio para que alguien sorprenda y ése puede ser Gilbert, que es el más explosivo y puede desmontar un grupo lanzando un sprint.

¿Ve a Gilbert capaz de sorprender a los sprinters y a sus equipos?

Es capaz de hacer una llegada como la de la primera etapa del Tour. No es un final tan duro, pero querrá jugar esa baza y atacar a 500 metros para sacar tres o cuatro segundos y ganar. En caso de llegada masiva uno de los máximos rivales es Sagan y me está sorprendiendo mi compañero Lars Boom, que en Inglaterra ha ganado etapas y la general a corredores que preparan el Mundial y tiene una debilidad por los maillots. Las pruebas que llevan de premio un maillot, en ruta o ciclo cross, le motivan y será un rival a batir.

¿La selección española también apuesta por el sprint con Freire o contempla otra alternativa?

El planteamiento en principio tiene que ser para Óscar, pero según los intereses de los demás, hay que buscar una situación en la que no muchos están interesados. Casi todos tienen un hombre rápido y van a intentar aprovecharlo, pero se puede provocar una situación diferente. Será complicado, pero habrá que estar atentos. Tenemos un equipo todoterreno, con gente que se mueve bien con el aire como Lastras, Flecha, Luis León, Rojas, Reynés..., que le pueden preparar bien el terreno a Óscar. Es un equipo bastante compensado, el que más me gusta de mis cuatro Mundiales.

Freire llega al Mundial tras una de sus temporadas más discretas...

No ha sido uno de sus mejores años, pero sigue ganando desde su debut. La Vuelta era necesaria de cara a la preparación del Mundial, sobre todo siendo una carrera tan larga de 280 kilómetros. Ha sido una Vuelta dura y corrías el riesgo de que te dejara machacado, pero era interesante que la acabara para mejorar su preparación. Él se conoce bien, ha disputado Mundiales entrenándose en casa y desde que se retiró en la Vuelta se ha entrenado en casa muchos kilómetros tras moto. En la última clásica que ganó Gilbert hizo séptimo y, según me ha contado, dejándose ver y haciendo cosas que no debía. Estaba muy contento con las sensaciones.

¿Los 280 kilómetros pueden provocar sorpresas el domingo?

El fondo de nadie llega hasta los 280. A partir de los 200 los sprinters dejan de ser sprinters, los escaladores dejan de ser escaladores. Con esa distancia los especialistas dejan de serlo y todo se iguala y el que más fuerza guarda se beneficia. Además se anuncian para el domingo temperaturas entre nueve y catorce grados y hasta lluvia y puede ser un drama, pero va a ser para todos y vamos a intentar jugar nuestras bazas, que no pasan sólo por llegar al sprint.

Casi medio equipo lo componen corredores del Rabobank...

Hemos coincidido los cuatro en varios Mundiales y cada uno con sus características somos importantes para el seleccionador. Barredo puede cubrir muchos frentes, es un todoterreno, hace cualquier trabajo que se le pida. Luis León, por su calidad, en papeletas difíciles de carrera, como un corte, tiene mucho gas. A mí me llevan por mi carácter para coordinar la orquesta al correr sin pinganillos. No suelo tener muchos pelos en la lengua para decir cosas y por ahí van los tiros. Luego hay que estar en forma. Le dije al seleccionador que si no estaba bien se lo iba a decir. No he hecho mi mejor Vuelta, pero sé que estoy bien.

¿La lesión que le hizo abandonar el Tour condicionó su Vuelta?

Llegué justo a la Vuelta, esperaba ir a más a partir de la primera semana, pero físicamente no he estado bien de salida y eso me ha impedido ir evolucionando. He tenido problemas, sin ser capaz de encadenar tres ataques cuando la carrera iba rápida. Me faltaba aire, pero las piernas llegan bien y espero que no me afecte el catarro que he pasado estos días. Tuve que ir al médico y me recomendó un antibiótico para tomarlo tres días y recuperarme para la carrera.