59 DONOSTIA ZINEMALDIA
Isaki Lacuesta polarizó opiniones con «Los pasos dobles»
Isaki Lacuesta provocó división de opiniones en Zinemaldia con «Los pasos dobles», que indaga en la vida del pintor François Augiéras y cuenta con la colaboración del artista Miquel Barceló. El catalán fue objeto de ovaciones pero, sobre todo, de duras críticas durante la presentación.
Ariane KAMIO | DONOSTIA
Isaki Lacuesta (Girona, 1975), casi un habitual en Zinemaldia -presentó «Los condenados» en 2009 y «La noche que no acaba» el año pasado-, participa en esta edición con un doble proyecto. Por un lado, con «Los pasos dobles», que se proyecta en la Sección Oficial, y por otro, con «El cuaderno de barro», en Zabaltegi-Especiales. Ambas filmaciones forman parte de un mismo rodaje, aunque la primera se presenta como película y la segunda en formato de documental.
El gerundense presentó ayer en Sección Oficial «Los pasos dobles», una cinta grabada en tierras africanas y que indaga en la vida del pintor francés François Augiéras, quien cubrió de pinturas un búnker militar en el desierto africano y luego lo dejó hundirse en la arena para que nadie lo encontrara hasta el siglo XXI.
Bokar Dembele, un bailarín local de raza negra, encarna las vivencias del artista en Mali, mostrando su faceta de escritor, pistolero, santo, ladrón, diablo o una mezcla de todo ello. Esta narración va intercalando imágenes de Miquel Barceló en plena acción, como si éste interpretase al alter ego de Augiéras.
«La duplicidad es una forma de cambiar de estilo sobre la marcha, porque eso hace que las cosas cobren una intensidad mayor», reconoció el cineasta catalán en rueda de prensa.
La película ha suscitado opiniones contradictorias entre la crítica. Algunos la calificaron de obra maestra, mientras otros no dudaron en mostrar su indignación ante el estilo «costumbrista» del título y con que Lacuesta participe en el festival con dos películas sobre el mismo tema, «mientras hay muchos directores deseando de enseñar sus obras en este certamen».
Algo tenso por las reacciones más duras, el cineasta justificó su opción por lo críptico. «Las películas imperfectas me gustan, es algo que me satisface. Hemos utilizado la metáfora de las termitas para hacer algo con huecos en medio, en la que no hubiera explicaciones», dijo Lacuesta, que recorre con su cámara el cromatismo maliense de la misma manera que Barceló lo integra en su obra. «Cuando llegamos a Mali, descubrimos que el paisaje del lugar era igual que los cuadros de Miquel. No hay nada más natural que eso».
Por su parte, mucho más desenfadado, el pintor y ahora actor Miquel Barceló ironizó sobre las preguntas de los periodistas y la deserción de algunos de los concurrentes: «Los críticos de cine son peores que los de arte. Los de cine se van».