Los parlamentarios navarros de Bildu comparecieron ayer ante los medios para responder al recorte de 294,3 millones anunciado por el Gobierno navarro y aseguraron que «ya es hora de que los responsables de esta pésima gestión comiencen a asumir responsabilidades».

El portavoz de Bildu Maiorga Ramírez exigió a los responsables gubernamentales que «asuman que han llevado a cabo una política drásticamente errónea», que «se han dedicado a derrochar el dinero cuando lo debían haber invertido en el bienestar de la ciudadanía», diseñaron un plan anticrisis que «no ha funcionado» y elaboraron «erróneamente» los presupuestos para este año.

Por ello, Ramírez señaló que el consejero de Economía, Álvaro Miranda, «debería empezar a ir pensando en presentar su dimisión. Y el Gobierno de Nafarroa -añadió-, debería comenzar a pensar en lo que le demanda la ciudadanía y la oposición, que no es otra cosa que dar un giro absoluto en sus políticas de priorización de gasto y asumir una reforma fiscal progresista».

El programa de reducción del gasto, denunció, da prioridad a aspectos «intocables» como las infraestructuras y, en concreto, el tren de alta velocidad, un proyecto que a su juicio debería reconsiderarse.

En ese sentido, Ramírez se preguntó por qué el Gobierno foral no se plantea otras medidas como la venta de las acciones de Iberdrola o la revisión de las cantidades que se pagan al Estado, para evitar recortes en áreas como la sanidad o la Universidad Pública de Navarra.

Además, aludió a la «dramática» situación en la que van a quedar los ayuntamientos navarros, cuya financiación se va a ver reducida en el último trimestre cuando tienen gastos comprometidos.

Tras censurar la «negativa» del Gobierno foral a actuar por la vía de los ingresos, anunció que en la próxima Mesa y Junta del Parlamento de Navarra presentarán una iniciativa para una reforma fiscal en profundidad que afectaría a todas las modalidades, especialmente a los impuestos de Patrimonio, Sociedades y Sucesiones.

«El rey desnudo»

Nafarroa Bai también hizo pública su posición ante el recorte de las cuantías económicas destinadas a los ayuntamientos que su parlamentario Xabi Lasa, calificó de «chapuza», por lo que pidió la elaboración de una nueva ley de financiación de haciendas locales que atienda a criterios objetivos.

Lasa afirmó que el sector municipal ha estado «minusvalorizado históricamente por el Gobierno de Navarra» y ahora se aprueba un recorte en su financiación, de aproximadamente un 30% en el cuarto trimestre, que hace peligrar, dijo, los servicios municipales.

El también parlamentario Juan Carlos Longás puso de relieve que, durante los años de la llamada «burbuja inmobiliaria», la situación financiera municipal quedaba «oculta» o «enmascarada», pero, «cuando ha explotado, vemos que el rey está desnudo» y que las entidades locales ya no pueden atender servicios básicos.

El sindicato EHNE también mostró su malestar por los recortes aprobados por el Gobierno foral y, tras recordar que el pasado día 20 trasladaron a la consejera Lourdes Goicoechea la necesidad de «no tocar» los fondos que «van directamente a las explotaciones, al bolsillo de los agricultores y ganaderos», como son todo el grupo de medidas agroambientales o la ganadería sostenible, han sido precisamente las que han sufrido recortes, algunas «levemente pero en otras ha habido cambios importantes».