Sanz confirma su mala relación con Barcina y su rechazo al pacto con el PP
Miguel Sanz está tan molesto con Yolanda Barcina por haber pactado con el PP sin consultárselo que no participará en la campaña electoral, al considerar que se ha puesto en peligro el Gobierno de coalición con el PSN, «que ya de por sí tiene dificultades».
M.D. | IRUÑEA
El ex presidente del Gobierno de Nafarroa y de UPN Miguel Sanz confirmó que sus relaciones con su sucesora en ambos cargos, Yolanda Barcina, son malas y criticó con dureza el pacto electoral suscrito con el PP, al tiempo que rechazó de manera contundente la posibilidad de participar en la campaña electoral del 20N.
En una entrevista publicada ayer por «Diario de Navarra», Sanz destaca que el acuerdo UPN-PP «no es oportuno», ya que supone un obstáculo más para el Gobierno de coalición con el PSN, «que ya de por sí tiene dificultades».
Asimismo, confirma que Barcina no le consultó el acercamiento al PP, sino que le llamó tras anunciarlo en un acto de UPN en Cadreita: «Tras anunciarlo me llamó. Me comentó: he dicho esto. Y punto. Fue una conversación muy corta». Las malas relaciones de Sanz con Barcina quedan en evidencia en otra respuesta, a la pregunta de cuándo habló por última vez con su sucesora. «Hace poco en Corella, en la Feria del Vino [el 25 de setiembre]. Hablamos cinco minutos de estos temas».
Sanz recuerda que cuando él dirigía el partido, Barcina votó a favor de romper relaciones con el PP para pactar con el PSN y asegura que «a mí nadie me consulta ya nada».
Sanz muestra también su malestar por el hecho de que el retorno a la alianza electoral con el PP se aprobase de forma casi unánime en la Ejecutiva de UPN, «sobre todo porque muchos de los que votaron a favor habían estado en mi casa de Corella mostrando su disconformidad».
Tras señalar que no participará en la campaña electoral «bajo ningún concepto» y destacar que «no me faltaba más» que estar en un mitin con Jaime Ignacio del Burgo y Mariano Rajoy, Sanz se niega a decir a quién votará. «No lo voy a decir. Yo soy de UPN, no del PP», declara antes de rechazar la posibilidad de votar a Rubalcaba.
«Yo no tengo ningún dilema. El voto es secreto. El PP, si no recuerdo mal, votó en contra de la investidura de Barcina, ¿no?», añade Sanz.
Asimismo, Sanz revela que ha tenido propuestas para formar un nuevo partido. Cuando le preguntan si esta oferta provino de «gente de UPN» responde, evasivo, «me lo han propuesto. Dejémoslo ahí. Cada día estoy más convencido de que algunas cosas se han hecho porque sabían que yo iba a ser incapaz de liderar un nuevo proyecto».
También Sanz destaca que UPN ha vuelto a ser «un partido de capillitas, de camarillas, lo que se denominaba el aparato todo el día en el partido incordiando, manipulando... Pensé que eso había acabado».
Preguntada por periodistas en la fiesta de la Policía española por las palabras de Sanz, Barcina eludió responder y se limitó a señalar que tiene «gran respeto» por su antecesor.
Sanz justifica su nombramiento como presidente de Audenasa, concesionaria de la autopista AP-15, ya que es «un seguro de desempleo», al tiempo que considera necesarias las cesantías tras dejar el cargo.